La Cámara de Diputados declara la emergencia en Bahía Blanca, mientras avanza una investigación sobre el criptoescándalo que involucra a Javier Milei.

En una sesión extraordinaria, la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad la declaración de emergencia en Bahía Blanca tras el mortal temporal que dejó al menos 16 muertos y causó devastadoras inundaciones en la ciudad. Con 230 votos a favor, los legisladores manifestaron la urgencia de responder a esta crisis, que ha afectado gravemente a la comunidad.

Juliana Santillán, diputada de La Libertad Avanza, calificó la situación como «un desastre de magnitudes catastróficas» y atribuyó sus consecuencias a años de inacción por parte de los gobiernos provinciales. El Gobierno nacional anunció un envío de 10 mil millones de pesos para ayudar a las familias afectadas y facilitar la reconstrucción de la infraestructura crítica.

A la par de la declaración de emergencia, se hizo evidente que el escándalo por la criptomoneda $LIBRA también ocupa un lugar central en la agenda del Congreso. Se están formando comisiones específicas para investigar las irregularidades en torno a esta criptomoneda, que involucra a Javier Milei y su familia. Los legisladores buscan interpelar al Presidente y a su hermana para esclarecer el caso, que ha generado gran controversia en el ámbito político.

Durante el debate, el diputado Rogelio Iparraguirre enfatizó que el Gobierno debe actuar con celeridad y compromiso, no solo para responder a la emergencia en Bahía Blanca, sino también para demostrar responsabilidad ante las acusaciones que envuelven a la criptomoneda. Por su parte, Diego Santilli, del PRO, destacó que la situación en Bahía Blanca tendrá un impacto duradero en todo el país, dada la importancia portuaria de la ciudad.

Las tensiones en el Congreso se intensifican con protestas en las calles, donde grupos de jubilados y barras de fútbol se manifiestan, reflejando el descontento social y la expectativa de una respuesta efectiva. A medida que el Congreso aborda simultáneamente la crisis de Bahía Blanca y el escándalo de $LIBRA, la necesidad de transparencia y acción decisiva se vuelve más evidente.