Ante la elevada venta de reservas que llevó a cabo el Banco Central desde que empezó febrero, particulares consideraban que podría haber un tercer Programa de Incremento Exportador, pero a priori fue desestimado por el Gobierno.

   

Este sábado, el Gobierno anunció que no está en sus planes implementar una tercera edición del “dólar soja”. La medida, que fue aplicada en septiembre y diciembre de 2022, permitía la liquidación excepcional de divisas y fue concebida para ayudar a la economía del país. Sin embargo, ahora parece que el Gobierno se centrará en buscar medidas para apoyar las economías regionales como la pera, la manzana y el vino.

El Secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Juan José Bahillo, afirmó en una entrevista con Radio 10 que la implementación de un tercer “dólar soja” no está en la agenda semanal de los funcionarios del Ministerio de Economía. También negó que la caída de las reservas del Banco Central haya impulsado la medida. En este sentido, Bahillo intentó poner fin a los rumores y especulaciones que habían surgido en los últimos días.

Bahillo explicó que la sequía ha tenido un gran impacto en la producción de granos y otros productos del campo. Por ejemplo, en el caso del trigo, la producción se redujo de 22 millones de toneladas a 13,4 millones de toneladas. A pesar de esto, el Gobierno afirmó que van a garantizar que los volúmenes de cosecha de los granos puedan satisfacer la demanda interna.

Bahillo también indicó que la sequía ha tenido un gran impacto en los productores ganaderos y en los tamberos. Sin embargo, señaló que el Gobierno está analizando medidas para apoyar a estos productores afectados.

En cuanto a la venta de dólares por parte del Banco Central, Bahillo explicó que la medida fue necesaria para evitar una mayor caída en las reservas. La venta de dólares fue la más alta en un día desde finales de 2021, lo que ha generado preocupación entre los inversores.

A pesar de la reducción en la producción de granos y otros productos del campo, el Gobierno afirmó que el país podrá cumplir con sus compromisos de exportación e importación. En el caso del trigo, el país exportará unos 5 millones de toneladas, mientras que los otros 6 millones y medio se destinarán al mercado interno.