En octubre, las entidades financieras incrementaron la demanda de pases activos a niveles no vistos en años para abastecer los créditos solicitados por sus clientes. ¿Escasean los pesos?
En octubre comenzó a verse un fenómeno que no ocurría desde hace varias décadas. Ante la necesidad de hacerse de pesos para abastecer la demanda de crédito de sus clientes, los bancos se volcaron a pedirle liquidez al Banco Central a través de la ventanilla de pases activos por montos relativamente significativos.
Al ser instrumentos muy cortos (a uno o siete días de plazo), las oscilaciones diarias del stock de pases activos fueron importantes pero los últimos datos oficiales disponibles muestran que al 22 de octubre había posiciones abiertas por $199.904 millones. El pico se dio el 14 de octubre, cuando tocó los $521.141 millones. Ese día el Tesoro liquidó los títulos de la última licitación, en la que absorbió financiamiento neto por $830.000 millones y dejó sin liquidez a algunas entidades.
¿Significa esto que la plaza quedó seca de pesos, un punto al que aspira a llegar el Gobierno antes de abrir el cepo? No en términos generales. Los bancos tienen en su poder un stock total de LEFI (Letras Fiscales de Liquidez emitidas por el Tesoro, pero que administra el BCRA) de $11 billones y el Gobierno tiene depositado en el Central un colchón de liquidez de $13,27 billones previsto para abastecer eventuales desarmes de las posiciones que las entidades financieras tienen en títulos públicos.
Pero sí es cierto que se dan faltantes puntuales de liquidez en determinadas entidades. Además, algunos bancos priorizan hacer desarmes graduales de Lecap u otros instrumentos del Tesoro y por eso recurren a la ventanilla de los pases activos, por los que el BCRA les cobra una tasa nominal anual del 45%.
La consultora 1816 destacó que, en paralelo, “también creció considerablemente el volumen de operaciones de pases entre bancos con tasas más de 300 puntos básicos por encima del rendimiento de las LEFI”.
Bancos, pases, deuda y tasas
La consultora señaló que al haber una liquidez más ajustada en moneda local este proceso tendrá un impacto en las tasas de interés. Por lo pronto, el 45% de TNA que cobra el BCRA por los pases activos supera el rendimiento de las LEFI y el de las Lecap y Boncap en el mercado secundario.
En ese sentido, como contó Ámbito, hay expectativa en la city por lo que hará el Ministerio de Economía con en la próxima licitación de deuda en pesos, que se realizará el martes. En particular, el foco está en la tasa de interés: ¿convalidará la baja de tasas de Lecap largas y Boncap que se registró en el mercado secundario? Muchos analistas creen que sí. En 1816 plantean que, al haber menores vencimientos ($1,6 billones), puede ser una oportunidad para que el Tesoro baje el costo de fondeo, muestre una curva invertida y relaje las condiciones de liquidez del sistema financiero.
Otros operadores y analistas creen que Luis Caputo priorizará dar una señal de continuidad del incentivo al “carry trade” y que por eso se moverá con cautela.
Argentina aprobó el examen del GAFI y no entró a la lista gris
Finalmente, la Argentina no entró a la lista gris tras aprobar el exámen del GAFI. «Zafamos de la lista gris del GAFI«, celebró un mensaje de una experta en prevención de lavado de dinero (PLA) enviado a Ámbito, apenas se conoció el veredicto del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) respecto de la evaluación que hizo sobre el sistema de combate de delitos financieros de la Argentina.
El Gobierno recibió la noticia con mucho entusiasmo y el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, quien encabeza el grupo de funcionarios que viajó a París, festejó que, “gracias al arduo trabajo del Gobierno de Javier Milei, Argentina ha evitado caer en la lista gris del GAFI”.
Y es que, tal como dijo a este medio Emilse Córdoba, directora de Bell Inversiones, «para el Mercado Argentino caer en la lista gris hubiese sido muy dañino ya que, al formar parte de esta lista toda la estructura bancaria, financiera y legal se vería modificada». Esa nómina incluye a aquellos estados que, como Venezuela y Mónaco, no colaboran en el combate contra los capitales producto de delitos financieros. Otros países incluidos en el listado son: Croacia, Bulgaria, Burkina Faso, Camerún, República Democrática del Congo, Haití, Namibia, Nigeria, Senegal, Siria, Vietnam y Yemen.
Nuestro país ya fue parte de dicho grupo entre 2010 y 2014, pero hizo esfuerzos para salir y lo logró. Salir de la misma – o no entrar – es un factor clave ya que cuando una nación entra en la lista gris del organismo internacional que fija las recomendaciones para todo el mundo de prevención y combate de lavado, «automáticamente, el riesgo de cada persona física y jurídica que reside y opera en ese mercado se eleva, y las entidades del exterior deben aumentar sus tareas de Debida Diligencia y hasta pueden tomar la decisión de no vincularse con argentinos«, explicó Córdoba.
Fuente: ambito.com