Alta tensión en el Hospital Garrahan: Sindicalistas ocupan oficinas directivas en protesta por descuentos salariales

Alta tensión en el Hospital Garrahan: Sindicalistas ocupan oficinas directivas en protesta por descuentos salariales

Un tenso episodio se registró en el Hospital Garrahan luego de que grupos sindicales de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y la Asociación de Profesionales y Técnicos (APyT) irrumpieran y ocuparan las oficinas de la Dirección Médica del hospital pediátrico.

El conflicto se desencadenó a raíz de los descuentos salariales aplicados por el Consejo de Administración a los empleados que participaron en los paros recientes. La conducción del hospital defendió la medida, explicando que las deducciones responden a la normativa vigente sobre presentismo y que se trata de una acción reglamentaria, no de una sanción arbitraria.

Denuncias de «violencia y coerción»

Fuentes del hospital describieron el accionar gremial como «violento y extorsivo», lo que paralizó la actividad institucional en el área. Testigos señalaron que los sindicalistas, con pancartas, retuvieron a varios empleados que se encontraban cumpliendo tareas administrativas, impidiéndoles salir de sus oficinas.

«El accionar violento de los gremios demuestra que no se trata de un reclamo legítimo, sino de una maniobra política que busca paralizar la gestión del hospital», afirmaron voceros del centro, describiendo la situación como una «coerción que excede cualquier marco de protesta sindical”.

Postura del Hospital

Las autoridades emitieron un comunicado asegurando que, a pesar de la tensión, el hospital continúa funcionando con normalidad. Subrayaron que el presupuesto, los bonos remunerativos y las obras en curso están garantizados con financiamiento propio.

Desde el Consejo de Administración reiteraron que no cederán «ante presiones o actos de violencia» y remarcaron que el Garrahan “es una institución al servicio de los niños y sus familias, no un espacio de militancia ni un botín gremial”. Por su parte, los gremios justificaron su acción denunciando que la dirección «castiga a los trabajadores que se movilizan por mejoras salariales».