En medio de un contexto de ajuste severo y priorización del equilibrio fiscal, el Presupuesto 2026 ha revelado una cifra que ha despertado una fuerte polémica en la opinión pública: la asignación de casi 10.000 millones de pesos para la remodelación de la residencia del embajador argentino en Estados Unidos.
Prioridades bajo la lupa
Mientras el discurso oficial hace hincapié en la austeridad y el recorte de gastos «innecesarios», los documentos oficiales enviados al Congreso detallan una inversión total de $9.429 millones. De este monto, más de la mitad —unos $5.388 millones— se desembolsará de manera inmediata durante el próximo ejercicio económico.
El inmueble en cuestión se encuentra en Dupont Circle, uno de los barrios más exclusivos y costosos de Washington D.C. El argumento oficial se centra en la «puesta en valor» de un edificio patrimonial, pero la magnitud del presupuesto asignado choca de frente con la realidad de millones de argentinos que enfrentan una pérdida constante de su poder adquisitivo.
Un gasto que genera rechazo
La decisión ha generado una inmediata ola de críticas. Los puntos principales de indignación ciudadana son:
- El contraste social: La cifra equivale a miles de jubilaciones mínimas o raciones alimentarias para comedores escolares.
- La ubicación: El barrio de Dupont Circle es sinónimo de opulencia, lo que refuerza la percepción de un gasto desconectado de la urgencia nacional.
- La oportunidad: En un momento donde se pide un «esfuerzo histórico» a la población, el mantenimiento de infraestructuras de lujo en el extranjero parece una contradicción política.
Detalles de la obra
El plan de intervención contempla varias etapas, extendiendo el gasto más allá de 2026 hasta completar la totalidad de la partida. Las tareas están orientadas a la refacción estructural y estética del edificio, asegurando que la representación diplomática mantenga los estándares de una de las capitales más influyentes del mundo, aunque sea a un costo que muchos consideran inaceptable en la Argentina actual.