Se las habían robado a su padre y un coleccionista las ofrecía por Internet. Una de las camisetas es la del gol a Italia en el mundial 90.
Cuatro camisetas de la Selección Argentina usadas por Claudio Paul Caniggia que habían sido robadas de la vivienda de su padre en la ciudad de Buenos Aires, fueron recuperadas durante un operativo de la Policía de Córdoba.
Se trata de camisetas que Caniggia había utilizado en mundiales, con un enorme valor histórico. Una es la que usó en la semifinal contra Italia en el mundial de 1990 y la otra es la del recordado gol a Nigeria en el mundial Estados Unidos 1994, aquella de la imagen inolvidable pidiéndole el pase a Maradona. Las casacas, además, tienen dedicatorias y firmas del exdelantero.
Habían sido un regalo de Cani a su padre Hugo, quien falleció en mayo de 2014, en Catamarca. Después de su muerte, se realizó una mudanza sin que nadie notara que las camisetas habían desaparecido.
Los Caniggia las vieron ofrecidas en internet y realizaron la denuncia para que la Justicia investigara cómo habían llegado a manos del coleccionista cordobés.
“Claudio está en Roma, está emocionado y feliz con la recuperación de estas camisetas que eran muy importantes para él”, dijo a la agencia de noticias Télam su abogado, José Vera.
El coleccionista
Leandro Fowler tiene 38 años, es riocuartense y un reconocido fanático de Caniggia y coleccionista de sus camisetas. Desde los seis años, cuando se disputó el Mundial de Italia 1990, que sigue al futbolista. Hasta el sábado contaba en su colección con 24 remeras originales utilizadas por el exdelantero.
En una entrevista realizada hace algún tiempo por Infobae, Leandro contaba que la camiseta del 90 fue obsequiada por Caniggia a un tío “que creo estaba presente en Italia junto a sus padres”. La del partido contra Nigeria en Estados Unidos 1994 fue la que usó cuando hizo sus últimos goles en la Selección Argentina.
Leandro tuvo la oportunidad de conocer a Claudio cuando estuvo en Córdoba en 2019, invitado por el representante de jugadores Horacio Rossi.
Fowler esperó al “Pájaro” en el lobby de un hotel y charlaron durante 15 minutos. En esa ocasión, el exfutbolista le firmó tres camisetas que se convirtieron en un tesoro para el coleccionista.