El máximo tribunal se pronunció a través de uno de sus integrantes sobre las anomalías detectadas en la Obra Social del Poder Judicial, que incluyen sospechosas licitaciones. Como era de esperarse, pasaron la «pelota».
El juez de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, dio cuenta sobre las irregularidades en la Obra Social del Poder Judicial de la Nación (OSPJN) y pasó la «pelota» a las autoridades de la organización por «no tomar medidas para corregir las deficiencias detectadas en la auditoría realizada«.
El magistrado integrante del máximo tribunal denunció que la falta de presupuesto para los años 2022 y 2023 es «particularmente grave«, y señaló que «los únicos balances que no se han presentado corresponden a la gestión del actual directorio«.
La OSPJN ha sido objeto de críticas desde que una evaluación realizada a la entidad reveló una serie de irregularidades contables y administrativas, por las cuales se culpa directamente a la Corte Suprema y esta, por obligación, tomó medidas y «comenzó a investigar los hechos del directorio«.
Entre las problemáticas denunciadas destacan las sospechas en torno a una serie de licitaciones. Las mismas fueron incluidas en el expediente del juicio político que enfrentan los jueces de la Corte Suprema, Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz, Ricardo Lorenzetti y Juan Carlos Maqueda.
Según Lorenzetti, la OSPJN fue notificada y no tomó medidas para corregir los incumplimientos que se denunciaron en la auditoría y ha seguido funcionando de la misma manera. No obstante, su argumento no fue bien recibido ni mucho menos considerado certero, debido a las filtraciones de chats de Silvio Robles, vocero de Rosatti, con Marcelo D’Alessandro, exministro de Seguridad de CABA, que evidenciaban una presunta maniobra de dádivas y tráfico de fallos que incluía al máximo tribunal.
Por FXFF