El sujeto pretendía burlar el fino olfato de los perros antinarcóticos. Le aplicaron una pena de 5 años y 6 meses de prisión.
Era la siesta del 31 de mayo de 2021. A las 14.10, personal del Escuadrón Núcleo 59 “Santiago del Estero” de Gendarmería Nacional interceptó un automóvil Chevrolet Aveo sobre la Ruta Nacional 34, a la altura de la ciudad de Pozo Hondo, departamento Jiménez.
El conductor había partido desde La Quiaca, Jujuy, y se dirigía hacia Lomas de Zamora, provincia de Buenos Aires, de acuerdo con las investigaciones.
El sujeto manifestó signos de nerviosismo, por lo que entró en acción la perra antinarcóticos “Yasi”, que le “indicó” a su guía la presencia de estupefacientes en el torpedo del vehículo. Efectivamente, al realizar la requisa ante la presencia de testigos, los uniformados detectaron la presencia en ese sitio de 20 paquetes rectangulares, que contenían 21,690 kilos de cocaína.
Los gendarmes comprobaron que los “ladrillos” se encontraban envueltos con papel carbónico y aluminio para burlar el fino olfato del can adiestrado, aunque los narcotraficantes no pudieron lograr el objetivo. En aquel momento, el sospechoso fue detenido y se secuestró el auto, un celular y 50 mil pesos que transportaba entre sus pertenencias.
En un juicio abreviado ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Santiago del Estero, el conductor jujeño reconoció ser el autor del delito de transporte de estupefacientes. En consecuencia, el Dr. Federico Bothamley, quien actuó como tribunal unipersonal, homologó el acuerdo al que llegaron la Fiscalía Federal y la defensa, y condenó al imputado, de apellido Sipe, a una pena de cinco años y seis meses de prisión. Asimismo, el magistrado dispuso el decomiso del auto en el que se movilizaba el autor de infringir la ley 23.737.