Los apoderados de las dos listas participaron de una conciliación que duró tres horas y no llegó a buen puerto. En paralelo, la CD actual realizó una denuncia por falsificación de firmas.
Luego de una conciliación de tres horas en el juzgado civil N° 11 de la Capital Federal en la que participaron los apoderados del oficialismo y la oposición de Boca Juniors, las partes no llegaron a un acuerdo y las elecciones que estaban pactadas para este domingo 3 de diciembre en la Bombonera quedaron definitivamente suspendidas y siguen sin fecha de realización.
Alrededor de las 12 del mediodía, los representantes de ambas listas se presentaron en Tribunales en busca de llegar a un acuerdo que les permita votar a los socios de la institución voten este fin de semana, tal como estaba programado. Hubo momentos de tensión y conversaciones con tono elevado. Por ahora no hay acuerdo entre las partes. El oficialismo propuso votar, que los 13.500 socios observados lo hicieran en una urna apartada y que, con el resultado puesto, se constatara si habían sido mal inscriptos para proceder a la anulación. La oposición propuso que cada parte sea interpelada por un perito y que la Justicia añada al suyo para llevar a cabo la limpieza del padrón. Pasadas casi tres horas de mitin, pasaron a un cuarto intermedio y finalmente no existió el trato. Las partes ya firmaron las actas.
En paralelo a este cónclave en Tribunales, Boca denunció -a través de su Departamento de Legales- que están falsificadas las firmas de los supuestos socios judíos que exigieron que las elecciones no se efectuaran el sábado 2 de diciembre por la celebración del sabbat, ante el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 10. Con el respaldo de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), la resolución del juez Ricardo Feliz Baldomar, a cargo del Juzgado Penal Contravencional y de Faltas N°22, dio lugar al pedido realizado por el fiscal Diego Espada de reprogramar los sufragios.
Fue llamativo que no fueran los damnificados quienes radicaran la denuncia sino los miembros de la actual comisión directiva. El acta notarial presentada indicó que tres de los supuestos socios denunciantes no firmaron el documento con el que se pidió pasar los comicios al 3 de diciembre. Esto puede ser interpretado como una maniobra de presión del oficialismo a la oposición para que ceda en la conciliación o bien significa que esta disputa sumará nuevos capítulos y definitivamente se terminó de quebrar cualquier acercamiento a un acuerdo.
El martes pasado, la Justicia había ordenado suspender las elecciones tras un pedido de la lista opositora encabezada por Andrés Ibarra y Mauricio Macri, que enfrentarán a Juan Román Riquelme y Jorge Amor Ameal, postulantes del oficialismo. La magistrada Alejandra Débora Abrevaya -hermana de Sergio Abrevaya, presidente del GEN, partido que integra Juntos por el Cambio-, a cargo del Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Civil N° 11, interpuso una medida cautelar y resolvió este martes “suspender el acto de elecciones” hasta tanto se definan “la situación de irregularidades detectadas prima facie del padrón mediante la acción correspondiente de depuración”.
Es así que en la audiencia de este jueves la actual comisión directiva, con la representación de sus abogados (Ricardo Rosica, secretario general y miembro de la Junta Electoral, y Walter Krieger, quien acompañó a Riquelme en su última conferencia de prensa), afirmó que fueron solamente 4.100 los asociados como adherentes que pasaron a activos durante el lapso denunciado, cifra mucho menor a los 13.364 que la oposición mencionó que se “trucharon”. Inclusive, los miembros de la presente CD alegaron que el resto de los asociados irregulares son heredados de la última administración de Daniel Angelici.
La oposición, representada por Javier Medin (hombre de confianza de Macri y candidato a vocal de la lista de Ibarra), y Sebastián Silvestri (miembro de la Junta Electoral durante los ocho años de gestión de Angelici), no aceptaría esta propuesta. “Primero que muestren los papeles, los analizaremos y después vemos. Pero de entrada estarían admitiendo una irregularidad por lo que para nosotros no sería adecuado. Queremos votar el domingo, pero manteniendo la posición original de que los 13.364 hechos a las apuradas queden fuera del padrón”, dijo uno de los hombres más cercanos a Mauricio Macri previo a la conciliación.