La novedad pondría fin a la era de los motores y baterías. Es un nuevo prototipo, que no necesita energía constante.
Un grupo de investigadores japoneses anunció la creación de sistema de levitación magnética para autos que permitiría que los coches se desplacen sin contacto con el suelo.
Esta tecnología, presentada por integrantes del Departamento de Máquinas Cuánticas del Instituto de Ciencia y Tecnología de Okinawa, es similar a la que se utiliza en los trenes Maglev y propone revolucionar el transporte al eliminar la necesidad de motores o baterías para el movimiento de los vehículos.
La levitación magnética se basa en la creación de un campo magnético que permite que los vehículos floten sobre una superficie. Para lograr esto, se requiere que, por un lado, los coches estén hechos de materiales diamagnéticos, y luego, una serie de imanes dispuestos a lo largo de vías, una pista o camino.
Este sistema permite que un tren o coche se eleve unos centímetros, y así se logra un movimiento suave y eficiente, sin fricción, ni necesidad de baterías, motores o cualquier forma de empuje mecánico o eléctrico.
Para que este sistema funcione, es decir, para que se genere el campo magnético, se necesita una energía inicial. Un ejemplo en el que se aplica la levitación magnética es el que utilizan los trenes Maglev, en el que potentes electroimanes superconductores impulsan formaciones que se mueven por sobre rieles. Sin embargo, este tren necesita energía eléctrica continua para mantenerse elevado, ya que si se corta la electricidad, se desconecta el campo magnético sobre el que flota el tren.
Cómo funciona el prototipo de levitación japonés para autos
El prototipo presentado por los científicos japoneses mejora el método tradicional de levitación magnética al permitir que la energía eléctrica solo sea necesaria al inicio para crear el campo magnético, en lugar de requerir energía continua.
Para lograrlo, utilizaron grafito pulverizado, que es un material de carbono cristalizado. Mediante un proceso químico, crearon una pasta mezclándola con cera y fabricaron una placa bajo la cual hay varios imanes dispuestos en una rejilla continua, lo suficientemente potentes como para provocar el efecto de levitación magnética.
Desafíos de la levitación magnética
El prototipo experimental tiene unas dimensiones reducidas. Pero para llevarlo a una escala real, donde pueda tener aplicaciones prácticas, hay que resolver un par de problemas: es necesario reducir la energía cinética a nivel de superficie y abordar desafíos como la amortiguación de vórtices, que puede afectar la estabilidad del sistema.
Resolver el primer problema es necesario para aumentar la autosuficiencia y la sensibilidad de los vehículos. En cuanto a la amortiguación, se explica de la siguiente manera: un sistema que oscila tiende a perder esta condición por fuerzas externas y con el tiempo. En este caso, hay que encontrar la forma de evitar que el grafito inmerso en el campo magnético pierda energía.
Todavía falta para que se superen esos dos obstáculos, pero el primer paso ya está dado. Con más investigaciones y pruebas, es solo cuestión de tiempo. A medida que se superen estas limitaciones, la levitación magnética podría ser una realidad para el transporte cotidiano y así eliminar la dependencia de motores y baterías y con ella, dejar de consumir combustibles fósiles o gastar recursos naturales.