Los delincuentes les pidieron “la plata de la cosecha”, aunque solo tenían $ 170 mil. Los golpearon, maniataron y les realizaron un disparo.

Un productor agropecuario se encontraba en su domicilio de la localidad de San Ramón, departamento Banda, en compañía de su esposa y sus cuatro hijos menores. El hombre de 42 años estaba mirando televisión en su habitación, ocasión en la que fue sorprendido por un sujeto que apareció en la puerta y le apuntó con un arma de fuego, que aparentaba ser un pistolón. Seguidamente, escuchó el grito de su mujer, quien se encontraba en otro sector de la casa y fue inmovilizada por otros dos delincuentes.

La mujer fue trasladada al dormitorio matrimonial, donde la hicieron sentar junto a su esposo en la cama y les exigieron que miraran al piso, tras lo cual les pusieron prendas de vestir en la cabeza. En tanto, a los menores los reunieron en otro sector y uno les dijo: “Quédense quietos, si colaboran no les pasará nada”.

Al agricultor le ataron las manos con una bufanda y comenzaron a recorrer las instalaciones. “Dame la plata de la cosecha, nosotros sabemos que vos tienes la plata”, le exigió uno de los asaltantes. La víctima les dijo que solo tenía $ 170 mil en la billetera que era para pagar a los empleados. La respuesta provocó que uno de ellos realizara un disparo junto al cuerpo del hombre. Tras apoderarse del efectivo, siguieron el recorrido por la vivienda y cada vez que no encontraban plata, golpeaban al productor. “Entregá la plata, sino los chicos van a quedar con un trauma”, le exigió uno de los malvivientes que hacía de jefe o voz de mando.

Los asaltantes siguieron con la mujer, a quien insultaron. “Te vamos a matar, más vale que entregues la plata”, la amenazaron. La llevaron hasta un galpón de la propiedad, donde estaba un camión, que fue revuelto sin encontrar efectivo. Mientras regresaban, agredieron físicamente a la mujer de 41 años.

De regreso los dos en la habitación, el “jefe” ordenó que la pareja se desvistiera. “Desnúdense los dos, y los chicos, traeme agua fría, van a ver lo que es tortura. Van a hacer matar a sus hijos por no entregar la plata, ustedes no los quieren”, les manifestó.

Finalmente, el sujeto accedió al pedido de la mujer y no se quitó el pantalón. Luego los volvieron a maniatar.

Uno de los malvivientes encendió la moto del productor y se marchó, aunque luego regresó con otro motociclista. Discutieron afuera por plata y antes de fugar en dirección a la Ruta Nacional 34, interrumpieron la electricidad de la casa.

Luego de unos minutos de silencio, el hombre se desató y liberó a su esposa. Subieron la llave térmica y fueron a contener a sus hijos menores que estaban en otra habitación; algunos de ellos se habían orinado por la traumática y violenta situación.

Tras la denuncia, se dio intervención al Departamento de Robos y Hurtos Banda, por orden de las autoridades de la Fiscalía.

Además de la plata que era para los peones, se llevaron mercadería y diversos bienes

La casa quedó totalmente desordenada. El matrimonio realizó un relevamiento de sus bienes y determinó que le habían robado una escopeta calibre 16, doble caño, cuatro cartuchos, un elevador de tensión, dos celulares, una pava eléctrica, una bolsa de 25 kilos de harina, tres packs de fideos de 5 kilos, un pack de 12 paquetes de puré de tomate, un pack de arroz de 10 kilos, un pack de diez cajas de mate cocido, cinco kilos de yerba, cinco paquetes de sal, cuatro bidones de 5 litros de desinfectante del hogar, una balanza digital de repostería, una jarra de vidrio con seis vasos, un juego de 6 tazas, un juego de pocillos de 6 unidades y un sartén eléctrico.

También se llevaron una transmisión completa para moto, un casco, una mochila, calzados, un televisor de 32 pulgadas, dos mochilas escolares, una garrafa de 10 kilos, una plancha, un secador de cabello y herramientas, entre otros artículos.