Cada 5 de octubre, en Argentina se pone en valor la obra pública en relación a infraestructuras terrestres que facilitan la comunicación entre regiones.
El origen de la fecha se remonta al año 1925 cuando se reunía en Capital Federal el Primer Congreso Panamericano de Carreteras, con el objetivo de proyectar la construcción de caminos para lograr la integración entre los países americanos, y de esta manera favorecer los vínculos productivos, económicos y sociales en el continente.
En esa oportunidad, los congresales coincidieron en aprobar una ponencia en el sentido de invitar a los países representados a celebrar en toda América el “Día del Camino”, instituyendo para tal fin, los días 5 de octubre. En esta fecha, cada año se promueve la realización de jornadas de educación vial para concientizar sobre el uso del espacio público, las vías de circulación y el respeto por las normas de convivencia vial.
En sintonía con el Primer Congreso Panamericano de Carreteras, el mismo día pero de 1932 se promulgó la Ley de Vialidad (11.658) en la cual se creó la Dirección Nacional de Vialidad.