El hecho sucedió en horas de la siesta de este lunes 30 de diciembre.
Un hombre de 35 años, identificado por la Policía como Mario Sebastián Herrera, domiciliado en el barrio Sarmiento de la ciudad de La Banda, se presentó ayer a la siesta en la casa de su expareja, de la que se encontraba separado desde hace tiempo. La mujer, Juana Valeria Cisneros, de 41 años, lo atendió en la puerta y lo hizo pasar porque su exconcubino quería “hablar”. En efecto, para concretar la conversación, ambos se trasladaron hasta una de las habitaciones.
A partir de ese momento, los investigadores tratan de reconstruir lo ocurrido entre las cuatro paredes con el testimonio de la dueña de casa. La mujer expuso ante los policías que su expareja comenzó a realizarle escenas de celos y a reprocharle comentarios de que la vieron en compañía de otro hombre. Se produjo una discusión, especialmente porque la mujer le recordaba que la relación sentimental había terminado entre ellos. En un momento del intercambio de palabras, según la mujer, Herrera extrajo un arma de fuego de la cintura, más precisamente un revólver cromado, que lo colocó sobre una cómoda, como una forma de intimidarla. La discusión prosiguió, aunque presuntamente el hombre habría realizado una acción que ella interpretó como violenta y agarró el arma de fuego. En esa circunstancia, según dijo, disparó en forma accidental el revólver. La bala impactó en pleno rostro de Herrera.
La mujer salió de la habitación, le contó lo sucedido a su familia que estaba en la propiedad y solicitaron ayuda médica. Luego de que llegara la ambulancia, los paramédicos informaron que el hombre estaba sin vida.
El hecho generó la presencia del personal de la Comisaría Nº 56 y de la Departamental 5. Los detalles del caso fueron informados a la Dra. Ximena Jerez, representante de la Unidad de Violencia de Género e Intrafamiliar de Banda y Robles, quien ordenó que Cisneros quedara aprehendida por homicidio.
A la dependencia también habían sido llevadas tres familiares de la imputada, pero siguieron en libertad tras brindar sus testimonios.
La casa de la homicida quedó con custodia
Tras el asesinato, un grupo de familiares de la homicida se trasladaron a la Departamental 5, a donde no solo habían trasladado a la sospechosa Cisneros, sino también a otras tres familiares que estaban en la casa al momento del hecho. Sin embargo, tras brindar sus testimonios, las tres parientes siguieron en libertad y solo quedó aprehendida la mujer que admitió que realizó el disparo.
No obstante, familiares y amigos de Herrera, luego de conocer su muerte, se trasladaron hasta la casa de la imputada y hubo supuestas amenazas de quemar la vivienda. En consecuencia, por el momento, la propiedad permanece con custodia policial.