La empresa metalúrgica, fundada en 1907, pasará a manos privadas estadounidenses. Por cuánto se ofreció y cuáles son las condiciones.
El ministro de Economía, Luis «Toto» Caputo, anunció este miércoles la primera privatización de la presidencia de Javier Milei: se trata de Industrias Metalúrgicas Pescarmona (Impsa), una compañía que fue vendida al consorcio IAF, cuyo socio principal es la estadounidense Arc Energy. La firma norteamericana aceptó pagar 27 millones de dólares por las acciones estatales de la empresa y hacerse cargo de una deuda que alcanza los 576 millones de dólares.
Impsa S.A., fundada en 1907, se dedica a la fabricación de equipamiento metalúrgico, como turbinas, torres eólicas, grúas, reactores de abastecimiento para los sectores de metalurgia, de generación de energía y tecnología y equipos de proceso para la industria de Oil & Gas.
Uno de los principales activos de la empresa es que cuenta con más de 700 trabajadores calificados, de los cuales un 35 por ciento son ingenieros. Además, genera de manera directa contratos con más de 100 pymes nacionales.
A través de proyectos de energía hidroeléctrica, solar, eólica y nuclear, Impsa participa de proyectos en todo el mundo. De esta manera, exporta el 85 por ciento de su producción y tiene presencia en más de 40 países.
La empresa metalúrgica había sido estatizada en 2021, durante la presidencia de Alberto Fernández, cuándo la firma afrontaba serios problemas de endeudamiento. Una de las principales razones de su crisis financiera fue que Venezuela nunca le pagó una deuda que ronda los 300 millones de dólares.
El Gobierno festejó la venta de Impsa
La venta de la empresa metalúrgica especializada en tecnología e ingeniería para el desarrollo energético fue mérito de las negociaciones de la Comisión Evaluadora, integrada por el Fondep del Ministerio de Economía, la Agencia de Transformación de Empresas Públicas y la provincia de Mendoza.
Según precisó el Gobierno nacional en un comunicado oficial, esta comisión resolvió recomendar la preadjudicación de las acciones de la compañía en poder del Estado nacional y provincial a dicha empresa.
«Privatizamos Impsa«, celebró el ministro en su cuenta de X al compartir la noticia de la venta, y ponderó el trabajo del Secretario de Industria y Comercio de la Nacion, Pablo Lavigne; el director ejecutivo de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA, antes AFIP), Juan Pazo; y el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo.
En su análisis, la Comisión concluyó que «se acreditaron las condiciones de idoneidad, capacidad económica y financiera de los principales accionistas de IAF para cumplir con la capitalización que requiere Impsa y su gerenciación».
También remarcó que «se mantuvo la vigencia del seguro de caución para garantizar la oferta que se realizó», y valoró que la oferta «se adecua a las necesidades que presenta la empresa para que esté en marcha y operativa».
Al respecto, el Gobierno apuntó que «IAF deberá obtener la conformidad de los acreedores para la renegociación de la deuda y, en caso de que se cumpla con la condición, se procederá a la redacción del contrato de compra venta de acciones y su posterior transferencia«.
En esta línea, precisó que «el capital de Impsa se integra con tres tipos de acciones»: las clase A, en manos de la familia Pescarmona con un 5,3%; las clase B, en manos de los acreedores con un 9,8%; a través de sendos fideicomisos de garantía, y las acciones clase C, que pertenecen al Fondo Nacional de Desarrollo Productivo (FONDEP) en un 63,7% y el 21,2% restante a la provincia de Mendoza.
Fuente: pagina12.com.ar