La marcha, que contará con la participación de trabajadores y empresarios, se produce en respuesta al virtual hundimiento del proyecto de ley en el Congreso, luego de haber sido aprobado en la Cámara Baja
Este martes 18 de marzo, más de 30 localidades de Colombia serán escenario de una gran movilización en apoyo a la reforma laboral promovida por el Gobierno del Cambio. La marcha, que contará con la participación de trabajadores y empresarios, se produce en respuesta al virtual hundimiento del proyecto de ley en el Congreso, luego de haber sido aprobado en la Cámara Baja pero recibir una ponencia negativa en la Comisión Séptima.
Un paso hacia la dignidad laboral
De aprobarse la reforma, ya sea en el Congreso o mediante una eventual consulta popular propuesta por el presidente Gustavo Petro, se permitiría la formalización de 60 mil madres comunitarias, sustitutas y trabajadoras de hogares infantiles. Además, se restablecería el pago de horas nocturnas y dominicales, y se asignaría remuneración a los estudiantes aprendices del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA).
«La misión de la reforma es que los trabajadores sean tratados con dignidad», afirmó Petro al nuevo ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, a quien encomendó la tarea de impulsar la aprobación del proyecto. Según el mandatario, en un Estado Social de Derecho la fuerza laboral debe gozar de dignidad, pese a la oposición de sectores empresariales que, según sus palabras, «parecen asumir posturas esclavistas».
Impacto y beneficios de la reforma
Según el Gobierno y los congresistas que la impulsan, la reforma busca reducir la informalidad y mejorar la estabilidad laboral mediante la promoción de contratos a término indefinido. También plantea la reducción de la jornada laboral a 42 horas semanales, la regulación del trabajo en plataformas digitales y la inclusión de trabajadores rurales en la formalidad. Otro de sus objetivos es garantizar la protección de los derechos colectivos de la clase obrera y ajustar las condiciones de despido y aseguramiento social de los trabajadores independientes.
Para la Escuela para el Liderazgo Democrático de Carolina Corcho, la reforma es clave para transformar el mercado laboral en un país donde la informalidad alcanza el 70 %. Esto permitiría que más trabajadores accedan a derechos básicos y salarios justos.
Críticas y desinformación desde la oposición
A pesar de los beneficios expuestos, la reforma enfrenta una fuerte oposición de sectores empresariales y políticos que argumentan que podría generar pérdida de empleos y afectar la economía. Bruce Mac Master, presidente de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (ANDI), ha afirmado que el proyecto impactaría negativamente a las familias colombianas, aunque sin presentar pruebas concretas.
Mac Master también sostiene que los salarios en Colombia son altos, ignorando que el país tiene una de las tasas salariales más bajas de América Latina, con un promedio de 320 dólares mensuales, muy por debajo de Costa Rica (725 dólares) o Chile (500 dólares).
Para los trabajadores, las críticas de la oposición reflejan una negativa a mejorar sus condiciones. «Quieren que celebremos que nos den migajas de la riqueza que producimos», expresó Daniela Zapata, trabajadora informal en Medellín, quien sostiene a sus dos hijos con su pequeño negocio de venta de café.
Estrategia pedagógica y consulta popular
Para contrarrestar la desinformación, el Gobierno ha puesto en marcha una estrategia de pedagogía ciudadana. Este domingo, en el Parque Nacional de Bogotá, diversas colectivas de mujeres y trabajadoras informaron sobre los beneficios de la reforma y llamaron a la movilización.
Además, el Gobierno impulsa la idea de una consulta popular para aprobar reformas sociales. Para que esta iniciativa prospere, al menos 13,5 millones de ciudadanos deberán participar y votar mayoritariamente a favor. Sin embargo, experiencias previas, como la consulta anticorrupción, no alcanzaron el umbral necesario, lo que representa un reto significativo para esta estrategia.
El ministro Sanguino también ha señalado que algunos puntos de la reforma podrán implementarse mediante decretos reglamentarios. «Expediremos al menos siete decretos para garantizar avances en la reforma», aseguró.
Convocatorias en distintas ciudades
Las movilizaciones del 18 de marzo se llevarán a cabo en diferentes puntos del país. En Medellín, la cita es a las 9:00 a. m. en la sede de la Asociación de Institutores de Antioquia (Adida). En Bogotá, la marcha partirá del Parque Nacional con destino a la Plaza de Bolívar.
El éxito de estas manifestaciones podría definir el futuro de la reforma laboral y su posible implementación a través de mecanismos alternativos. La movilización social será clave en este proceso de transformación laboral que busca garantizar derechos y mejorar las condiciones de vida de los trabajadores colombianos.