La joven de 24 años le dijo por mensajes que estaba en una fiesta y quería entrar al baño. El hombre abrió el portón y se produjo el ataque. Fue golpeado y atado de pies y manos.
Minutos antes de las tres de la madrugada de anteayer, un hombre de 32 años se encontraba descansando en su domicilio del pasaje Mosconi del barrio Aeropuerto. En esa circunstancia, recibió un mensaje de texto de una joven de 24 años, domiciliada en el barrio Sarmiento de la ciudad Capital, con quien mantiene una relación amorosa informal. «¿A dónde estás?, ¿ya duermes? Necesito ir al baño, estoy en una joda a la vuelta de tu casa», le escribió. El hombre no respondió el mensaje. Sin embargo, momentos después, la mujer volvió a escribirle: «Estoy afuera en un Uber, abrime».
Ante esta situación y la necesidad de la joven por ingresar al sanitario, el dueño de casa salió y le abrió el portón a la mujer. No obstante, antes de que volviera a colocar el candado en el portón, la amante lo agarró del cuello desde atrás y comenzó a gritar: «Ahora, entren, entren». Desde el auto descendieron tres sujetos, pero igualmente logró colocar el candado. El hombre comenzó a forcejear con la mujer, ocasión en la que los hombres saltaron las rejas y comenzaron a atacarlo a patadas y a golpes de puño y con un arma de fuego, hasta que se desvaneció. Cuando recuperó el conocimiento, comprobó que lo habían llevado hasta el piso del comedor y lo ataron de pies y manos. En ese momento, los delincuentes se estaban retirando, oportunidad en la que lo amenazaron con provocarle más daño a él y a sus familiares.
La víctima logró soltarse de las ataduras y realizó un relevamiento de sus pertenencias. Determinó que le habían sustraído una amoladora, un taladro, una soldadora, un rifle de aire comprimido, un parlante, dos pares de zapatillas y una caja de herramientas. También rompieron las pantallas de dos televisores de 50 y 58 pulgadas.
La denuncia fue realizada ayer y el hombre fue examinado por el médico de Policía, quien diagnosticó lesiones curables en 10 días.
El fiscal Rubén Alfonzo ordenó que personal de Robos y Hurtos de la Comisaría Nº 49 analizara las imágenes de las cámaras de seguridad del damnificado, que habían logrado captar el momento del ingreso de los delincuentes y del ataque, hasta que cortaron los cables, y que se ubicara a la vecina del barrio Sarmiento.