Sus restos serán velados en el municipio bonaerense de San Martín. “¡Hasta siempre, querida Mirta!”, la despidieron desde la asociación.
Mirta Acuña de Baravalle murió este viernes 1° de noviembre a los 99 años. Fue una de las fundadoras de Madres y Abuelas de Plaza de Mayo. Sus restos serán velados en la Municipalidad de San Martín, en la provincia de Buenos Aires.
Las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo fue una organización que surgió durante la dictadura militar argentina (1976-1983), cuando un grupo de mujeres comenzó a reunirse en la Plaza de Mayo para exigir información sobre sus hijos e hijas desaparecidos. Mirta era la madre de Ana María, que fue detenida y desaparecida en 1976. Su hija estaba embarazada de cinco meses. Nunca supo qué fue lo que pasó con ella y con su yerno, Julio César Galizzi.
“Ante la dolorosa partida de nuestra querida vecina Mirta Baravalle, una de las fundadoras de Abuelas y Madres de Plaza de Mayo, este sábado de 16 a 19 horas realizaremos una ceremonia de despedida en el Hall del Palacio Municipal.¡Hasta siempre!”, comunicó el municipio que encabeza el peronista Fernando Moreira.
“Despedimos a otra compañera de lucha, fundadora de Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, Mirta Baravalle. A sus 99 años, Mirta partió sin el abrazo de su nieto o nieta. Al suyo y a todos, los seguiremos buscando. ¡Hasta siempre, querida Mirta!”, relataron desde la asociación.
Quién fue Mirta Baravalle, una de las fundadoras de Madres y Abuelas de Plaza de Mayo
Mirta Acuña de Baravalle murió este viernes a los 99 años. Fue una de las 12 fundadoras de las asociaciones Madres de Plaza de Mayo y Abuelas de Plaza de Mayo.
Mirta era madre de Ana María Baravalle, secuestrada el 27 de agosto de 1976 junto a su yerno, Julio César Galizzi, durante la última dictadura militar. Su hija, de 28 años, estudiaba Sociología y estaba embarazada de cinco meses. Desde allí, la histórica activista por los derechos humanos comenzó la búsqueda incansable de su hija y de su nieto, que se presume fue dado a luz en cautiverio.
“Buscamos a nuestros nietos, sin olvidar a nuestros hijos”, repitió Baravalle en varias oportunidades.