La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) confirmó la realización de un paro nacional este martes 9 de diciembre en rechazo a la reforma laboral que el Gobierno Nacional impulsa en el Congreso. La medida de fuerza busca frenar las modificaciones que, según el gremio, atentan contra los derechos laborales históricos.

Daniel Catalano, secretario general de ATE-Capital, aseguró que el objetivo de la gestión del presidente Javier Milei es mucho más profundo que una simple reforma, buscando “que desaparezca la organización sindical” y, consecuentemente, los convenios colectivos.

Alcance de la Reforma y Plan de Lucha

Catalano detalló las graves implicaciones que, a su juicio, tendría la reforma:

• Poner en duda los acuerdos de estabilidad laboral.
• Eliminar las indemnizaciones o forzar renuncias para nuevas contrataciones en algunos sectores.

El dirigente señaló que la convocatoria a sesiones extraordinarias del 10 al 30 de diciembre no solo incluye la reforma laboral, sino también una reforma penal, lo que amplía el frente de conflicto.

Diálogo Sindical y Servicios Esenciales

A pesar de que los secretarios generales de las dos CTA (Hugo Yasky y Hugo Godoy) han conversado con el triunvirato de la CGT para coordinar posibles medidas conjuntas, Catalano enfatizó que el paro de ATE se llevará a cabo independientemente de ese resultado.

Respecto a la cobertura de servicios durante la medida de fuerza, el gremialista fue enfático al referirse a la suspensión o apercibimiento de médicos adheridos a las huelgas:

“No hay antecedentes en la Argentina que alguien se haya muerto por abandono de los médicos por plegarse a medidas sindicales. Lo que no dejamos de hacer es atender las guardias y los pisos. Y las cirugías que no se pueden reprogramar, se hacen.”

ATE reitera así su compromiso de lucha sin dejar de garantizar la atención en las áreas esenciales y urgentes de la salud pública.