Tras la fuerte devaluación de diciembre, las cuatro causas que brindaron mejor expectativa al sector para lo que resta del año. Hablaron los titulares de ADEFA y Volkswagen Argentina.
Después de un comienzo de año muy duro, el clima en el mercado automotor está cambiando. Los patentamientos de 0km mostraron en julio una recuperación importante. Si bien el volumen de operaciones quedó levemente por debajo de un año atrás, la mejora respecto a los meses previos genera optimismo en el sector.
Tras la fuerte devaluación del peso en diciembre, las ventas de autos se derrumbaron de forma inversamente proporcional a la suba de precios. Con ese escenario se transitó el primer cuatrimestre del 2024, con pronósticos negativos para el resto del año. Sin embargo, una serie de factores cambió el panorama.
Autos: las causas de la mejora en las perspectivas
Por un lado, las fábricas y las concesionarias comenzaron a realizar descuentos que fueron bien recibidos por una demanda expectante. Hasta ese momento, los compradores no estaban dispuestos a convalidar los precios tan elevados. Otro punto importante fue la reaparición de crédito. Durante los últimos dos años, la financiación había perdido protagonismo a la hora de comprar.
Desde las propias automotrices – a través de sus departamentos financieros – y los bancos empezaron a lanzar líneas de financiación más atractivas, con tasas más bajas y mejores plazos. Todo esto favorecido por una reducción de los índices de inflación mensuales que trajeron más calma en el mercado y una mejora en el poder adquisitivo de una parte de la sociedad.
También empieza a ser una variable a tener en cuenta la mejora de oferta de vehículos por el crecimiento de las importaciones. Esta mayor competencia le puso un freno a la suba de precios. El otro tema que jugó un papel clave, al menos en julio, fue el aumento de la brecha cambiaria que funcionó como un estímulo de la demanda.
Con todos estos cambios, el mercado está mostrando señales de revertir la tendencia y eso se refleja en las proyecciones que están haciendo las marcas para lo que queda del año. A fines del 2023, se estimaba un mercado anual de alrededor de 350.000 unidades, muy por debajo de las 450.000 del 2023.
Pese a la complicada situación que se vivía en ese entonces, en algunas empresas aventuraban un año dividido en dos partes: un primer semestre malo y un segundo semestre mejor. Al parecer, eso sería lo que está sucediendo. Con los más de 40.000 vehículos vendidos en julio y una cifra similar o mayor para agosto, los pronósticos están mejorando.
Autos: qué números espera el mercado para cerrar el año
En las reuniones que mantienen las automotrices en ADEFA, ya hablan de un mercado de más de 390.000 0km como piso y hasta 430.000 como techo. De esta manera, la caída respecto al año pasado ya no sería del 20% o 25%, como se auguraba en diciembre último, sino que podría ser de sólo 10%. Incluso menos.
Es por eso que en el sector se sigue bien de cerca lo que está sucediendo con los patentamientos de agosto. Si bien son pocos días computados, se registra una suba de más del 10% contra julio pasado. El dato es muy provisorio y es posible que ese crecimiento se recorte. En realidad esperan un mes igual a julio – lo cual ya sería positivo -, pero nadie descarta que pueda cerrar algunos puntos porcentuales por arriba del mes pasado.
Durante la presentación del nuevo Peugeot 2008, el presidente de Grupo Stellantis y titular de ADEFA, Martín Zuppi, confirmó el cambio de expectativas.
“El mercado de autos dio un giro importante respecto al primer semestre y vemos una segunda mitad de año mejor. Vamos a superar las 380.000 unidades”, dijo. A ese pronóstico hay que sumarle el porcentaje de ventas de segmento de vehículos comerciales pesados. También en esa línea se manifestó el CEO de Volkswagen Argentina, Marcellus Puig, que estimó que el mercado total del año podría superar las 400.000 unidades.