La ministra de Seguridad justificó el accionar policial que hirió de gravedad a Pablo Grillo, reportero gráfico que permanece en estado reservado.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, atribuyó este jueves la grave lesión sufrida por el fotógrafo Pablo Grillo a “los que generan violencia”, en referencia a los disturbios ocurridos durante la marcha en el Congresode la Nación en defensa de los jubilados.
Con esta declaración, la funcionaria defendió la represión ejercida por las Fuerzas de Seguridad en la protesta, a la que se sumaron hinchas de fútbol. Grillo, quien fue impactado por un cartucho de gas lacrimógeno en la cabeza, continúa internado en estado crítico en el hospital Ramos Mejía.
“Cuando hay un ataque tan fuerte -porque un policía resultó herido de bala-, las Fuerzas de Seguridad deben actuar para proteger la democracia y el orden público, utilizando los recursos que el Estado les provee”, argumentó Bullrich en relación al proyectil de gas que golpeó al fotógrafo, provocándole fractura de cráneo y pérdida de masa encefálica.
En conferencia de prensa en el Ministerio de Seguridad, la funcionaria enfatizó que el lanzador de gases “es un arma no letal” cuyo propósito es “dispersar manifestaciones”. Y agregó: “No se trata de un accionar individual de un policía. Las fuerzas actúan en conjunto, respondiendo a los niveles de violencia que enfrentan. Quienes concurren armados a una marcha deben saber que el Estado argentino no es ingenuo”.
Asimismo, dejó en claro que no habrá ninguna investigación interna sobre la actuación policial: “Pablo Grillo estaba detrás de un foco de incendio. Lamentamos mucho su estado, pero quien disparó el arma no letal lo hizo correctamente».
«El proyectil rebotó en una barricada levantada por manifestantes violentos y cambió de dirección, impactando en el fotógrafo militante. Estas son las consecuencias de quienes fomentan la violencia y recibirán como respuesta la represión del Estado”, sentenció Bullrich.
Otro episodio que generó indignación fue la agresión a una mujer mayor, que cayó al suelo tras ser empujada por un policía. Bullrich minimizó el hecho y la calificó como “jubilada patotera”, argumentando que el agente actuó en defensa propia.
“Esa señora golpeó reiteradas veces al policía, le propinó cinco o seis golpes. Él se dio vuelta para intentar quitársela de encima y la mujer cayó. Fue ella quien inició la agresión. El policía solo se estaba defendiendo”, justificó.
Por su parte, la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina (ARGRA) exigió la renuncia de Bullrich y repudió la represión. Mientras tanto, Grillo, de 34 años, lucha por su vida tras ser operado de urgencia y permanece en terapia intensiva.
El Gobierno reafirmó su postura a través del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, quien responsabilizó a la oposición por la violencia en la Plaza Congreso y denunció “una suerte de golpe de Estado”. Sobre el caso de Grillo, minimizó el hecho al considerarlo un “accidente imprevisto”.