Cáncer: nuevo fármaco logró quitarle su mayor arma a las células tumorales

Cáncer: nuevo fármaco logró quitarle su mayor arma a las células tumorales

Científicos alemanes lo descubrieron. Consigue dejar a las células de la enfermedad muy debilitadas. La droga fue aprobada para su aplicación en humanos.

   

El cáncer puede resultar muy difícil de tratar porque muchas células tumorales se protegen químicamente ante el sistema inmune, usando una suerte de ‘sustancia’ que lo desactiva.

En las últimas décadas, se ha investigado mucho dentro de la rama de la inmunoterapia del cáncer en busca de maneras de contrarrestar esta enfermedad y ahora apareció una nueva herramienta que parece ser muy prometedora.

Un equipo de científicos de la Universidad de Bonn y del Centro Médico Universitario de Hamburgo-Eppendorf (Alemania) ha encontrado que un medicamento puede, aparentemente, anular este recurso del cáncer. El objetivo, dicen ahora, es optimizarlo para poder explotar esta capacidad.

¿Qué es la ADENOSINA?

Muchas células cancerígenas se cubren de una densa nube compuesta por una sustancia llamada adenosina. Por una parte, la adenosina suprime la actividad del sistema inmune y, por otra, estimula la formación de nuevos vasos sanguíneos que proporcionan oxígeno y nutrientes al tumor. Igualmente, hace posible que las células malignas migren a otros órganos y se produzca metástasis.

Los tumores producen grandes cantidades de esta sustancia, y además portan en la superficie de sus células varias enzimas que lo transforman en adenosina. Una de ellas se conoce como CD39, y cataliza el primer paso de esa conversión; por tanto, si se inhibe, no se puede producir adenosina.

El Ceritinib

Es comprensible, por tanto, que muchos investigadores de todo el mundo dediquen sus esfuerzos a buscar sustancias capaces de inhibir la enzima CD39. Hasta ahora, por desgracia, esta búsqueda había resultado infructuosa.

Sin embargo, en este caso, el equipo decidió optar por otra estrategia. En el organismo humano hay más enzimas que procesan el ATP, como las proteínas quinasas, y ya se conocen varias sustancias que las inhiben. Por tanto, se embarcaron en descubrir si alguna de estas sustancias inhibía también la enzima CD39.

De esta manera, tomaron 50 de estos fármacos y examinaron su efecto sobre la CD39. Una de ellas logró inhibirla: el ceritinib, un medicamento empleado para tratar un tipo específico de cáncer de pulmón.

Aún así, los autores advierten que no parece adecuado simplemente administrar el ceritinib a cualquier paciente. Y es que el fármaco inhibe una larga serie de enzimas, con lo que puede tener una serie de efectos secundarios bastante severos. El reto, ahora, es modificarlo de manera que apenas inhiba con más fuerza a la CD39.

Pero siempre hay que tener en cuenta que la personalización de cada terapia varía de acuerdo a las características de cada paciente.

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