El Consejo de Ascensión proclamó a Carlos III como rey de manera oficial en una ceremonia en el Palacio de Saint James, y luego en el Royal Exchange de Londres.
En sucesión de Isabel III, quien falleció el pasado jueves 8 de septiembre, su hijo Carlos III fue proclamado rey en una ceremonia ante el Consejo de Ascensión. En su discurso dado en el Palacio Saint James recordó a su madre y dijo: “Ella supuso un ejemplo de vida de servicio social. Su legado fue inigualable en dedicación y devoción. Damos las gracias por su vida”.
“Soy consciente de esta gran herencia y de los deberes y responsabilidades del trono que me es conferido”, reconoció a su vez. En ese sentido, al asumirlas, manifestó: “Me esforzaré en seguir el ejemplo inspirador para mantener el gobierno y buscar la paz, la armonía y la prosperidad de los pueblos de estas islas y de los reinos y territorios de la Commonwealth por todo el mundo”.
Por otro lado, el flamante rey Carlos III le dedicó unas sentidas palabras a la Camilla: “Me alienta profundamente el apoyo de mi querida esposa”. Tras esto, expresó: “Confirmo mi voluntad e intención de seguir la tradición de entregar toda la Corona al Gobierno para poder realizar mis obligaciones como jefe de Estado y jefe de la nación”.
“Se me ha conferido una tarea a la cual voy a dedicar el resto de mi vida. Por eso ruego por la ayuda y por la guía de Dios todopoderoso”, concluyó. Tras este breve discurso, tomó el juramento a la seguridad de la Iglesia de Escocia, y los testigos más el príncipe William y la reina consorte firmaron el documento.
Al finalizar la proclamación oficial de Carlos III, los trompetistas del Estado y los heraldos se dirigieron en procesión al Royal Exchange de la ciudad de Londres. Allí se hizo una proclamación adicional. Mientras tanto, las tropas del rey dispararon 41 cañones en Hyde Park y 62 cañones en la Torre de Londres.