Enojado porque su pareja había salido con amigas, el sujeto roció el inmueble con nafta y le prendió fuego, mientras la dueña de casa y la niñita dormían en su interior. La menor golpeó a la abuela porque se ahogaba y eso las salvó de morir.
Enojado porque su pareja había salido con amigas, un albañil de 22 años y domiciliado en el barrio La Católica, de la Capital, roció con nafta la casa de su suegra —donde él también vive— para luego prenderle fuego. Casi desata una tragedia porque la dueña de casa y su nieta, de un año, estaban durmiendo dentro del inmueble.
El individuo, identificado como Rodrigo Esteban Díaz, fue denunciado por su concubina y luego detenido por orden de la Dra. Norma Morán, jueza de Género, quien hizo lugar al requerimiento de la Dra. Andrea Juárez, de turno en la Unidad Fiscal de Género y Violencia Intrafamiliar para la Circunscripción Capital, quien le imputó los delitos de amenazas en perjuicio de la concubina, e incendio en perjuicio de la seguridad pública.
Denuncia de la pareja
Según indicó la pareja del inculpado, una joven de 18 años que cursa un embarazo de 4 meses, desde hace 5 meses que convive —en casa de su madre— con el acusado. Relató que el lunes último al mediodía regresó a su casa tras compartir una salida con amigas, siendo informada por su hermana que alrededor de las 3 de la madrugada, Díaz había llegado en estado de ebriedad y había rociado con nafta el inmueble, tras lo cual le prendió fuego, producto de lo cual varios bienes resultaron quemados.
Salvadas por la niña
Según su familiar, fue la niña de 1 año quien despertó a su abuela, a la que golpeó porque al parecer se ahogaba. La dueña de casa vio las llamas y junto a la menor salieron del inmueble, salvando sus vidas.
La denunciante sostuvo que su concubino le había enviado un mensaje de texto por WhatsApp, amenazándola con quemarle la casa, aunque ella le restó importancia porque sabía que él estaba molesto porque había salido con sus amigas, según dijo.