El cierre del gobierno federal de Estados Unidos alcanzó los 36 días, superando el récord anterior de 35 días (establecido en 2018-2019 bajo la administración Trump), sin que se vislumbre una solución a la creciente parálisis partidista en el Congreso. Un proyecto de ley de financiación a corto plazo fracasó en el Senado por decimocuarta vez al no obtener los 60 votos requeridos.

El Conflicto Político y sus Acusaciones

Los líderes republicanos y demócratas continúan culpándose mutuamente por la crisis, que fue desencadenada por una disputa sobre la extensión de créditos fiscales de la Ley de Cuidado de Salud Asequible (ACA):

• Líder Demócrata (Hakeem Jeffries): Acusó a los republicanos de negarse a extender los créditos fiscales de la ACA, lo que provocaría un aumento drástico en las primas y copagos para millones de estadounidenses.
• Líder Republicano (Mike Johnson): Sostuvo que el cierre, que atribuyó al líder de la minoría en el Senado, Chuck Schumer, nunca tuvo que ver con la atención médica.

El conflicto refleja una falta de bipartidismo y negociaciones de buena fe, mientras que el cierre es visto por algunos como una oportunidad para que la administración Trump impulse recortes de personal y por los demócratas para consolidar su agenda política.

Impacto Extendido y Costo para la Población

El cierre está afectando gravemente diversos ámbitos, con consecuencias directas en trabajadores y servicios esenciales:

• Trabajadores Federales: Cerca de 1,4 millones de empleados federales siguen sin cobrar, lo que obliga a algunos a recurrir a asistencia alimentaria gratuita. El director de la Oficina de Administración y Presupuesto de la Casa Blanca, Russell Vought, estimó que el cierre podría resultar en la eliminación de más de 10.000 empleos federales.
• Seguridad Aérea: Alrededor de 13.000 controladores aéreos y 50.000 agentes de seguridad aeroportuaria están trabajando sin paga. La Administración Federal de Aviación (FAA) reducirá el tráfico aéreo en un 10% en 40 aeropuertos a partir del viernes para evitar problemas de seguridad, ante el riesgo de cancelaciones masivas de vuelos.
• Asistencia Alimentaria (SNAP): La administración Trump tuvo que utilizar fondos de emergencia para mantener la mitad de las prestaciones del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP), que beneficia a 42 millones de estadounidenses, aunque Trump luego indicó que los fondos se distribuirían solo tras la reapertura del Gobierno.

Pérdidas Económicas y Sentimiento Público

La parálisis también tiene un alto costo económico y de confianza pública:

• Impacto en el PIB: La Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO) advirtió que el cierre podría disminuir la tasa de crecimiento anualizada del PIB real en el cuarto trimestre entre 1 y 2 puntos porcentuales. Se estiman pérdidas económicas de 11.000 millones de dólares si el cierre se extiende por seis semanas, y 14.000 millones de dólares si dura ocho semanas.
• Incertidumbre Económica: El retraso en la publicación de datos económicos clave ha aumentado la incertidumbre, llevando al presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, a advertir: «¿Qué se hace cuando se conduce con niebla? Se reduce la velocidad”.
• Desaprobación Pública: La aprobación del Congreso cayó al 15%. Encuestas muestran que el 68% de los estadounidenses siente que el Partido Demócrata está desconectado, mientras que el 61% opina lo mismo del Partido Republicano.

El primer cierre parcial del gobierno federal de EE. UU. ocurrió en 1976. Los expertos señalan que los cierres recientes se han politizado cada vez más, evidenciando la creciente división entre los dos partidos.