Los miércoles se realizan proyecciones de películas. El pasado 20 fue especial y aún más el viernes 22 para los pequeños pacientes.

El Cepsi Eva Perón fue el escenario de una doble celebración por el Día del Niño, brindando un momento de alegría y contención a los pacientes internados y a sus familias.

El pasado miércoles 20 de agosto, los residentes de pediatría del hospital organizaron una fiesta que, según la Dra. Ambrosioni, nació del «deseo de regalarles un momento de alegría y juego, a pesar de estar atravesando una internación». El evento superó las expectativas con la asistencia de numerosos niños y sus padres, quienes disfrutaron de bailes, pintacaritas, juegos y la entrega de juguetes.

«Como residentes, sentimos que no solo atendemos enfermedades, sino que también acompañamos a los niños y a sus familias en lo humano», afirmó la Dra. Ambrosioni. Este festejo fue una oportunidad única para acercarse a los pacientes desde un lugar más lúdico y afectivo, demostrando que la contención emocional es tan importante como el tratamiento médico. En un entorno hospitalario, estas actividades ofrecen un respiro muy necesario y contribuyen a una recuperación más integral.

Sumándose a los festejos, el viernes 22 de agosto, la Fundación María Graciela Maidana también celebró a los más pequeños en el salón auditorio del Cepsi. La jornada estuvo llena de juegos, sorpresas y mucha alegría compartida, reforzando el mensaje de que la felicidad de los niños es la mayor recompensa. Estas iniciativas son un claro ejemplo de cómo la comunidad y el personal de salud se unen para ofrecer espacios de respiro y esperanza a quienes más lo necesitan, creando un entorno más amable para los niños y sus familias durante un proceso de internación.

Más allá de los festejos puntuales, se destaca la visión integral del bienestar de los niños. Durante el período de internación en el Cepsi, se ofrecen diferentes actividades lúdicas y educativas a cargo de especialistas. El objetivo es que la internación no signifique una pausa en su crecimiento, sino una etapa donde se les brinde todo el apoyo necesario para su recuperación física y emocional.