Su patrón se presentó en el local escolar y entregó los bienes sustraídos, a cambio de la devolución del aparato.

El ordenanza de un colegio privado de la calle Cassaffousth 250 de la ciudad de La Banda ascendió a la terraza del establecimiento para realizar la limpieza, ocasión en la que advirtió la presencia de un teléfono celular apoyado en una pared. Asimismo, comprobó que no estaban dos caños estructurales, por lo que sospechó que un delincuente ingresó a robar y se olvidó el aparato. En este sentido, el ladrón tuvo que escalar una tapia para acceder a la terraza. 
El trabajador entregó el celular a las autoridades educativas, que fue depositado en la secretaría.
Posteriormente, se presentó un comerciante que tiene su local en las inmediaciones y le contó a los directivos que uno de sus empleados le había confesado que ingresó a la unidad educativa con fines delictivos y robó dos caños estructurales. Asimismo, el malviviente le dijo que se había olvidado el celular y quería recuperarlo. El comerciante le pidió a las autoridades escolares que le entregaba los artículos sustraídos y le pidió por favor que le devolvieran el aparato. Los docentes accedieron al pedido, aunque igualmente realizaron la denuncia penal en la Comisaría Comunitaria Nº 14.
Asimismo, expusieron que, en otra ocasión, robaron tres cajas de cerámicos. El fiscal Álvaro Yagüe ordenó que se notificara al comerciante que ejerciera control sobre sus empleados.