Cortó el cable coaxil y le realizó reanimación cardiopulmonar, pero había perdido la vida dos horas antes.
Minutos antes de las dos de la tarde de ayer, un hombre se dirigió a la parte trasera de su domicilio de la manzana 51 del barrio Campo Contreras de la zona sur de la ciudad Capital y descubrió un dantesco escenario: Su hermano de 31 años se encontraba ahorcado de la rama de un frondoso palo borracho. Desesperado, corrió y cortó el cable coaxil del que pendía y, a causa de la persistente lluvia, cargó a la víctima hasta un pasillo cubierto.
Colocó a su hermano en el piso y comenzó a realizarle masajes de reanimación cardiopulmonar (RCP), mientras llamaban a la Policía para solicitar ayuda médica. Seguidamente, se determinó que la víctima se encontraba sin vida. El médico de Policía estableció que llevaba alrededor de dos horas de fallecido y que no presentaba ningún tipo de signos de violencia.
La tragedia generó la intervención del personal de la Comisaría Comunitaria Nº 51 y la fiscal Jacqueline Macció, quien ordenó que el cuerpo fuera trasladado a la morgue judicial para la autopsia.