Fernández celebró con alegría a Nuestra Señora del Rosario, patrona de la ciudad

Fernández celebró con alegría a Nuestra Señora del Rosario, patrona de la ciudad
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Bajo el lema «María fortalece nuestras comunidades», se celebró la misa, seguida de una ceremonia de cambio de manto de la Sagrada Madre.

Con profunda devoción y espíritu comunitario, la ciudad de Fernández vivió una nueva edición de su fiesta patronal en honor a Nuestra Señora del Rosario, una de las celebraciones religiosas más arraigadas y tradicionales de la comunidad.

Las actividades se desarrollaron a lo largo de la novena, que comenzó el pasado viernes 3 de octubre, con la participación de fieles provenientes de distintos barrios y comunidades eclesiales que se sumaron a las misas y momentos de oración organizados por la parroquia local.

La celebración central tuvo lugar el domingo frente a la parroquia Nuestra Señora del Rosario, ubicada frente a la plaza Mitre. Desde allí partió la procesión con la imagen de la Virgen, que recorrió las calles de la ciudad acompañada por cánticos, rezos y una gran cantidad de devotos que manifestaron su fe y gratitud.

La jornada concluyó con la misa central, celebrada al aire libre sobre la calle 9 de Julio, en un marco de profunda emoción y fervor religioso.

El sábado, como antesala de la jornada principal, se realizó la «Caravana de la Fe» desde las 8 de la mañana, en la que la imagen de Nuestra Madre del Rosario recorrió todos los barrios de la ciudad, recibiendo muestras de afecto y oración por parte de los vecinos.

Bajo el lema «María fortalece nuestras comunidades», se celebró posteriormente la misa vespertina, seguida de una ceremonia de cambio de manto de la Sagrada Madre, que simboliza la renovación de la fe y la esperanza del pueblo fernandense.

La noche culminó con una vigilia y serenata a la Virgen, en la que participaron coros, músicos y grupos locales, en un ambiente de recogimiento y alegría compartida.

De esta manera, Fernández renovó una vez más su compromiso espiritual con la Virgen del Rosario, reafirmando su identidad comunitaria y su profunda devoción mariana, que año tras año reúne a familias, instituciones y fieles en una manifestación de fe viva y sincera.

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