Tras la denuncia de Carlos Pagni sobre presunta complicidad de la Aduana en el ingreso de valijas sin control, el Gobierno negó las acusaciones y sugirió que el periodista está «operando» con malicia.

El Gobierno salió al cruce de las acusaciones del periodista Carlos Pagni, quien denunció presuntas irregularidades en el control de un avión privado proveniente de Miami. El vocero presidencial, Manuel Adorni, negó rotundamente las acusaciones y sugirió que Pagni está «operando» con malicia.

Según Pagni, una mujer llamada Laura Belén Arrieta, supuestamente vinculada a la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), habría ingresado al país con múltiples valijas sin pasar por los controles de la Aduana en el aeropuerto de Ezeiza. El periodista afirmó que la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) y la Aduana habrían intentado realizar un operativo, pero recibieron la orden de no inspeccionar el equipaje.

Adorni, en su habitual conferencia de prensa, desmintió estas acusaciones y aseguró que la pasajera se sometió a todos los controles de Aduana, sin detectarse nada extraño. Además, destacó que el avión cumplió con todos los requerimientos de las autoridades tanto en Estados Unidos como en España y Francia, países donde también hizo escala.

«Cualquiera que tiene un mínimo conocimiento de cómo funciona Estados Unidos sabe que salir con un montón de valijas sin que nadie pregunte nada, infiere dos alternativas: o que sos un imbécil o que estás operando y tenés malicia», sostuvo Adorni, en clara alusión a Pagni, sin mencionarlo directamente.

El vocero presidencial también consideró «extraño» que se involucre a una persona que no pertenece al Gobierno y que solo tiene vida privada.

Por su parte, la Aduana confirmó que inició una investigación interna tras la denuncia, pero negó cualquier irregularidad en el control. Informó que el avión quedó en tránsito en un hangar hasta el 5 de marzo, cuando partió rumbo a París, donde también se realizaron trámites de rutina sin novedades.