Al sujeto -detenido desde la noche del lunes- le secuestraron prendas de vestir con manchas de sangre, las cuales serán analizadas. La mató y abusó.

Con el rostro, pecho y toda su ropa manchada con la sangre de Silvia Alicia Acevedo, el presunto homicida ascendió a un remís y, muy tranquilo, pidió ser trasladado hasta el barrio Primera Junta, donde fue apresado posteriormente.

El relato de un policía, quien franco de servicio trabaja como remisero, fue fundamental en la investigación que encabeza la fiscal Dra. Eugenia Callegaris, por el brutal crimen de Acevedo.

Según relató el cabo primero a la fiscal, entre las 9.30 y las 10 del lunes, cuando circulaba por avenida Colón a bordo de un remís, en la intersección de Pedro León Gallo y Colón, un ocasional pasajero le hizo seña para que se detuviera. El desconocido ascendió al remís y le pidió que “lo llevara al barrio Primera Junta”.

El efectivo indicó que “en el momento se dio vuelta para preguntarle la dirección al pasajero y vio que estaba ensangrentado”. “Me doy vuelta y lo miro; estaba bañado en sangre, estaba ensangrentada la cara, pecho y ropa. Todo con sangre. Le pregunté ‘¿a qué parte vas?’. Y él me respondió: ‘Al pasaje 114 entre Viamonte y Lavalle’”.

En el trayecto, tras mirarlo por el espejo retrovisor, el remisero indagó qué le había pasado y el sospechoso, identificado como Braian Gonzalo Cáceres, de 24 años y residente en el barrio Siglo XXI, le respondió: “He venido peleando”.

De inmediato, tratando de ayudarlo, el policía le preguntó: “¿Te hincaron?”, a lo que el ahora imputado por el homicidio de Acevedo respondió: “No, llevame a donde te dije”.

Tratando de brindarle asistencia, el conductor insistió: “Si quieres te llevo al Regional”. Por lo que contundente, Cáceres le respondió: “No, dejame adonde te dije”. Llegó a la dirección indicada y descendió.

Cerca de las 14.30, tras tomar conocimiento a través de un compañero de que la calle Pedro León Gallo estaba cortada por la Policía; el testigo comenzó a averiguar qué había pasado. Al tomar conocimiento del homicidio de Acevedo, de inmediato recordó a su pasajero. Se comunicó con la fiscal Callegaris, a quien le brindó la información.

Los efectivos de la División Homicidios y Delitos Complejos lo apresaron y le secuestraron las prendas de vestir.

Alicia Acevedo murió por un golpe en la cabeza y fractura del tabique nasal

En las últimas horas del lunes, el médico forense le realizó la autopsia al cuerpo de la jubilada de 63 años, quien fue asesinada a golpes en una vivienda abandonada. La mujer presentaba signos de abuso. El facultativo determinó que la muerte de Silvia Alicia Acevedo se produjo a causa de un fuerte golpe que sufrió en la cabeza.

Además, tenía una fractura del tabique nasal. La víctima también presentaba lesiones punzo-cortantes en el rostro y en la cabeza, por lo que se presume que fue atacada con un elemento contundente.