El OIEA advirtió que la República Islámica puso en marcha nuevas cascadas de centrifugadoras avanzadas.
Irán puso en marcha nuevas cascadas de centrifugadoras avanzadas y planea instalar otras en las próximas semanas luego de las críticas a su programa nuclear, informó la agencia de supervisión atómica de Naciones Unidas el viernes. Estados Unidos señaló que las acciones iraníes representaban una “escalada nuclear”.
La iniciativa hace avanzar aún más el programa nuclear iraní, que ya enriquece ucranio a niveles próximos al grado necesario para el armamento y acumula reservas suficientes para varias bombas nucleares. Sin embargo, el reconocimiento del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), dirigido por el argentino Rafael Grossi, no incluye ninguna sugerencia acerca de que Irán planee aumentar el nivel de enriquecimiento en medio de las crecientes tensiones entre Teherán y Occidente, mientras la guerra entre Israel y Hamas asola la Franja de Gaza.
El OIEA indicó que sus inspectores verificaron el lunes que la República Islámica había empezado a incorporar uranio a tres cascadas de centrifugadoras avanzadas IR-4 y IR-6 en su centro de enriquecimiento de Natanz. Las cascadas son un grupo de centrifugadoras que mueven el gas de uranio para enriquecerlo más rápidamente.
Hasta el momento, Irán ha estado enriqueciendo uranio en esas cascadas a una pureza de hasta el 2%. El país ya enriquece uranio hasta el 60%, a un pequeño paso técnico del grado armamentístico del 90%.
Irán planea también instalar 18 cascadas de centrifugadoras IR-2m en Natanz y ocho cascadas de IR-6 en sus instalaciones nucleares de Fordo. Cada uno de estos modelos enriquece uranio más rápido que las centrifugadoras de referencia iraníes, las IR-1, que siguen siendo la base del programa atómico de la nación.
Teherán no reconoció la decisión, que se produjo luego que el país amenazó con emprender acciones tras una votación de la Junta del Gobernadores del OIEA a principios de mes que censuró a Irán por no cooperar plenamente con la agencia.
“Responderemos en consecuencia”
La medida iraní fue criticada de inmediato por el vocero del Departamento de Estado, Matthew Miller.
“Irán pretende seguir expandiendo su programa nuclear de forma que no tiene ningún propósito pacífico creíble”, afirmó Miller en un comunicado. “Estas acciones planificadas socavan aún más las afirmaciones iraníes de lo contrario. Si Irán pone en práctica estos planes, responderemos en consecuencia”.
Miller no ofreció más detalles sobre las medidas que podrían tomar Washington y sus aliados. Sin embargo, Irán enfrenta ya severas sanciones económicas de Estados Unidos y otros que paralizaron su economía y provocaron la devaluación de su moneda en los últimos años.