La recuperación económica post Covid-19, la estrategia sanitaria regional, la lucha contra la corrupción, seguridad alimentaria y el diálogo con socios extrarregionales serán puntos centrales de la agenda que los cancilleres de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) debatirán en el encuentro a desarrollarse el miércoles 26, en el Palacio San Martín.
Afianzar la integración regional y fortalecer el estratégico vínculo de América Latina y el Caribe con la Unión Europea serán ejes diferenciados y concurrentes de dos cumbres que tendrán lugar en Buenos Aires la semana próxima, cuando, por un lado, se reúnan los ministros de Relaciones Exteriores de la Celac, y luego tenga lugar otro cónclave que protagonizarán los cancilleres de los 32 países que conforman ese mecanismo con sus pares de la Unión Europea.
La recuperación económica post Covid-19, la estrategia sanitaria regional, la lucha contra la corrupción, seguridad alimentaria y el diálogo con socios extrarregionales serán puntos centrales de la agenda que los cancilleres de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) debatirán en el encuentro a desarrollarse el miércoles 26, en el Palacio San Martín.
Los 15 ejes de acción establecidos por la Presidencia Pro Témpore (PPT) de la Celac -en manos de la Argentina- incluyen además otros temas de análisis: integración de infraestructura latinoamericana y caribeña, cooperación ambiental, y mejora de la situación y condición de las mujeres en los países miembros, informó el Palacio San Martín.
El cónclave estará encabezado por el canciller Santiago Cafiero, quien presentará los avances de las acciones desarrolladas por la Celac bajo la PPT argentina y moderará el diálogo que mantendrán los ministros de Relaciones Exteriores de los 32 países miembro de la comunidad.
El encuentro de cancilleres de América Latina y el Caribe se produce en un contexto en el que la PPT argentina apuesta a institucionalizar al bloque y a hacer de ese mecanismo regional un actor relevante en el concierto internacional con un papel activo en lograr una salida pacífica a la guerra en Ucrania, y ser un proveedor seguro de energía y alimentos sobre la base de un «multilateralismo solidario».
Se espera que estas y otras cuestiones formen parte del diálogo que los cancilleres de la Celac y la Unión Europea mantengan, un día después, el jueves 27, en la cumbre que se desarrollará en el Centro Cultural Kirchner (CCK), propuesta por la Argentina con el objetivo de reforzar el diálogo birregional.
«Encuentro inclusivo, plural y sin exclusiones»Tras cinco años de impasse y en un contexto internacional convulsionado por las consecuencias de la pandemia del Covid-19 y la guerra en Europa, ambas regiones acordaron realizar un «encuentro inclusivo, plural y sin exclusiones», bajo el espíritu de la «unidad en la diversidad», dijeron a Télam fuentes oficiales.
Mas allá de la declaración que pueda surgir de la cumbre, la «propia reunión es en sí misma el principal mensaje de unión y reencuentro a ambas orillas del Atlántico. América Latina, el Caribe y la Europa se muestran como fuertes contribuyentes al proceso de paz y estabilidad global», destacaron las fuentes.
Para el Gobierno argentino, la importante presencia de cancilleres latinoamericanos, caribeños y europeos que ya confirmaron su presencia en la cumbre «refuerza la relevancia del encuentro como señal de cooperación» y remarcaron que su agenda temática «representa las prioridades comunes identificadas por los 59 países que integran ambos bloques regionales».
Según se informó, tras esa reunión y para explicar los alcances de esta cumbre ministerial, el canciller Cafiero y su par europeo, el Alto Representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell Fontelles, ofrecerán una conferencia de prensa en el Palacio San Martín, a las 15.30.
Desde la Cancillería argentina destacaron que ambos bloques coinciden en la «relevancia de renovar su asociación estratégica, basada en vínculos históricos, culturales y humanos y reforzar los lazos para que las relaciones alcancen todo su potencial».
Previo a esas cumbres, el martes 25 a partir de las 13, en el Palacio San Martín, Cafiero y Borrell mantendrán una audiencia de trabajo bilateral donde se avanzará en los temas destacados de la agenda común entre la Argentina y la UE, a cuyo término -a las 15- ambos funcionarios brindarán una declaración conjunta ante la prensa.
La Unión Europea, como bloque, es el tercer socio comercial de la Argentina y el principal inversor externo.
Durante el 2021 el superávit comercial fue de USD 549,6 millones, con exportaciones que alcanzaron los USD 9.890,5 millones (un incremento de 48,1% respecto de 2020) e importaciones por USD 9.310,9 millones (41,3% más con respecto de 2020).
La iniciativa impulsada por el presidente Alberto Fernández de institucionalizar la Celac para dotarla de un mayor «músculo político» tuvo el aval «sin fisuras» en la XXXV Reunión de Coordinadores Nacionales del mecanismo regional desarrollada en agosto pasado también en Buenos Aires.
El tema se volvió a debatir un mes más tarde, en un desayuno de trabajo que Cafiero mantuvo en Nueva York con más de 20 cancilleres de los países de la Celac, en el que se ratificó la necesidad del fortalecimiento institucional del mecanismo regional.
El objetivo de ubicar a la Celac como un actor de mayor peso global que se propuso Fernández al asumir en enero de este año la PPT de la comunidad, tuvo una expresión concreta en el encuentro que el jefe de Estado argentino mantuvo en septiembre pasado con su par francés, Emmanuel Macron, en el contexto de la última asamblea anual de la ONU.
Consciente de la importancia que las reservas energéticas y el volumen de producción de alimentos de la región tiene en medio de la crisis internacional desatada por el conflicto bélico que enfrenta a Rusia con Ucrania y los países de la OTAN, el liderazgo argentino en la Celac busca que el bloque tenga mayor incidencia en el sistema de gobernanza global y con ello mayores beneficios para la zona más desigual del planeta.
En el último encuentro que Fernández mantuvo con Macron -quien invitó al presidente argentino a participar del Foro de Paris por la Paz, el 11 y 12 de noviembre- ambos mandatarios afianzaron posiciones comunes en busca de alertar al mundo sobre la necesidad de una «salida» a la guerra en Ucrania.
En esa reunión cerrada realizada en el Consulado de Francia en Nueva York -a la que el mandatario argentino fue invitado especialmente junto a otros cinco presidentes- tuvo como objetivo la gestación de una iniciativa internacional para alcanzar la paz en Ucrania, restablecer el suministro de bienes y calmar la tensión de precios en el mundo.
En ese sentido, comenzó a evaluarse la alternativa de una intervención conjunta de mandatarios de varias regiones del mundo que ejerza presión por una apertura del diálogo.
«Con Macron venimos trabajando desde hace tiempo, preocupados por los efectos de las consecuencias de la guerra, y pudimos continuar el trabajo que empezamos en París y seguimos en el G7», repasó, en la ocasión, Fernández en diálogo con medios argentinos que cubrieron aquella gira por los EEUU, entre ellos Télam.
En ese marco, Fernández enfatizó que el conflicto bélico «excede en mucho a la región y a lo que parecen sectores en pugna», al producir «enormes pérdidas» en el hemisferio sur, que «tienen que ver con el hambre».
La cumbre de cancilleres de la Celac y la UE se presenta ahora como una oportunidad para avanzar en la idea -al momento en estado embrionario- de sumar nuevos actores a la búsqueda de una rápida salida a la crisis global provocada por la guerra en Ucrania.