También criticó a Francia, a poco de que Milei se reúna con Macron, por la paralización del acuerdo comercial Mercosur-UE.
La canciller Diana Mondino sostuvo hoy que Gran Bretaña «con suerte son inquilinos» de las Islas Malvinas, mientras que en la previa del viaje del presidente Javier Milei a Francia, lamentó que el país europeo «hace una mala interpretación del sector agropecuario del Mercosur», lo cual impide que se llegue al acuerdo comercial con la Unión Europea (UE).
«Con suerte son inquilinos, nosotros somos los dueños de ese lugar», sostuvo Mondino al referirse al conflicto con el Reino Unido sobre la soberanía del archipiélago, al exponer en un encuentro organizado por el Rotary Club de Buenos Aires.
Al respecto, la ministra de Relaciones Exteriores rechazó la política que siguió el kirchnerismo y la gestión de Alberto Fernández en torno a la cuestión Malvinas.
«¿Cuál es la forma de lograr la soberanía? ¿La agresividad contribuyó a algo? No. Se dispuso que una empresa que opera en las islas no pueda operar en la Argentina, o elevar una queja si otro país permitía que un avión aterrizara en sus aeropuertos. Con nosotros eso se terminó», comparó la funcionaria.
Por otro lado, criticó a Francia a horas de que Milei aterrice en París para reunirse con su par de ese país, Emmanuel Macron, en el marco de la apertura de los Juegos Olímpicos.
«La campiña francesa está fuertemente subsidiada, hay una mala interpretación del sector agropecuario del Mercosur. Hace 19 años que se está estudiando (el acuerdo entre el bloque aduanero sudamericano y la UE) y no sé algún día saldrá. Si no sale, los que tendrían que estar preocupados son la UE.
Al disertar en el encuentro que se realizó en un hotel porteño bajo el título «La inserción de la Argentina en el mundo», Mondino también se refirió a las relaciones bilaterales con dos países clave, Brasil y China, que quedaron envueltas en algunas tensiones por cuestiones ideológicas tras la llegada al poder de Milei.
Sobre Brasil, dijo que hay «una excelente relación», buscando dejar de lado la mala relación personal entre Milei y «Lula» Da Silva: «Es una relación de hermano menor y hermano mayor, estamos en la misma familia, producimos lo mismo, y nunca seremos hermanos gemelos», evaluó.
En ese sentido luego hizo foco en los problemas que existen: «No hemos logrado una unidad aduanera, no hemos logrado tener fronteras integradas ni hay reconocimiento u homologación de títulos universitarios. Hay problemas de integración», remarcó.
Sobre China, la canciller sostuvo que hay «una buena relación», mientras que aclaró que el tema de la construcción de las dos represas en Santa Cruz «no es un tema de la relación con China, es con empresas que tienen accionistas chinos».
«Este gobierno está revisando lo que hay que hacer. Ya están empezadas. ¿Las decisiones del pasado te obligan a continuarlas? Eso es lo que se está analizando», agregó.
También se refirió a la polémica que hay en trabajadores del sector diplomático de la Cancillería que quedaron alcanzados por el Impuesto a las Ganancias: «Es un tema que afecta a un grupo de personas no es un tema nacional», señaló consultada por la prensa sobre esa cuestión.
«Lamentablemente, si un país tuviera que tener un único impuesto debería ser el de Ganancias. Es antipático decirlo pero es así», planteó.
Por último se refirió a su relación con Milei y cómo se siente trabajando para él: «Estoy comodísima, me deja hacer lo que quiera. Pensamos igual, él es un poquito más sanguíneo que yo. Es un placer trabajar para él», finalizó.