El asesino estaba internado con un disparo en la sien desde el día del luctuoso hecho de sangre. Se ordenó la autopsia.
Gustavo “Pasty” Santillán tenía 22 años. Vivía en la ciudad de Fernández –departamento Robles-. Se disparó en la sien, luego de haber asesinado de un tiro a su exnovia, Agustina Ibáñez. Agonizó durante un día y falleció.
El luctuoso hecho que conmocionó a la provincia se suscitó cerca de las 23.45 del domingo último, en una vivienda en construcción de la familia Ibáñez, en el paraje Pozo Suni, distante a unos 45 kilómetros de Fernández.
En el inmueble, que contaba con una habitación, encontraron sobre un colchón el cuerpo ya sin vida de Agustina Ibáñez, una adolescente de 16 años con domicilio en la zona. Al lado de su cadáver, estaba el femicida agonizando. Entre ellos, estaba el arma de fuego –un revólver calibre 32 milímetros- que fue empleado para asesinar a la menor y luego intentar suicidarse. A los pies de Santillán, la madre de Agustina encontró los celulares.
Santillán tenía un disparo en la cabeza; al igual que Agustina. Pero el joven presentaba signos vitales bajo. De inmediato fue trasladado en una ambulancia hacia el hospital zonal de Fernández y luego, por la gravedad de la herida, fue derivado hacia el Centro Integral de Salud La Banda, donde fue internado en la Unidad de Terapia Intensiva.
Los galenos que lo asistieron indicaron que presentaba una herida de bala con orificio de entrada en el lado derecho y con orificio de salida del lado izquierdo. El mismo fue decretado con muerte cerebral en la tarde del lunes.
Con el paso de las horas, el cuadro de salud de Santillán fue empeorando, mientras que los familiares y amigos de Agustina trataban de encontrar una respuesta a su abrupta muerte a manos del femicida.
Finalmente, en horas de la mañana de ayer, Santillán falleció a causa de su estado crítico.
El cadáver del femicida fue trasladado a la morgue judicial del hospital Independencia, a requerimiento de la Unidad Fiscal de Género de Banda y Robles, a cargo de la Dra. Pilar Gallo, donde se le practicará la autopsia correspondiente.
Mientras que los efectivos continúan con las pesquisas pertinentes sobre los pormenores del hecho y las pericias realizadas tanto en el arma de fuego secuestrada en el lugar del hecho, como en el análisis de los celulares tanto de la víctima –desde donde le envió Santillán un mensaje a su exsuegra y luego habría posteado un estado de WhatsApp, con una fotografía juntos-.