La comunidad académica y el ámbito de los estudios de género lamentan el fallecimiento de Eva Giberti, destacada psicóloga, psicoanalista, asistente social y profesora universitaria, quien murió este domingo a los 96 años. Columnista y fundadora de Página/12, Giberti dejó un legado inestimable en la teoría, praxis y difusión de la mujer y los Estudios de Género en Argentina.
Según informó su familia, los restos de la prestigiosa profesional serán velados esta tarde, de 14 a 20 horas, en Avenida Córdoba 3677, en la Ciudad de Buenos Aires.
Nacida en Buenos Aires el 21 de mayo de 1929, Eva Giberti fue una figura clave en la articulación del psicoanálisis con la perspectiva de género. Su extensa trayectoria fue reconocida oficialmente en 2003, cuando fue declarada Ciudadana Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires.
En 2019, durante un homenaje a su carrera en la Universidad del Museo Social Argentino (en el marco del Foro de Psicoanálisis y Género), Giberti se definió a sí misma: “Yo soy una mujer del siglo XX, que fue un siglo terrible pero también el de las grandes luchas de mujeres, nos movimos, avanzamos, fue fenomenal para las luchas de las mujeres.»
Una Vida Dedicada a la Denuncia y la Educación
A lo largo de su vida, Giberti demostró un compromiso constante con las causas sociales y la divulgación. Rememoró que, durante la dictadura de 1955, comenzó a trabajar como periodista en la revista Mundo argentino, donde denunció las condiciones de maltrato en la colonia-hogar Ricardo Gutiérrez. Este hecho la llevó a confrontar al gobierno de Pedro Aramburu, y posteriormente, a un trabajo como asistente social que la expuso directamente a la corrupción. “Ahí aprendí de golpe lo que es la miserabilidad, la corrupción,” señaló.
A pesar del desprecio inicial de algunos profesionales de la medicina y el psicoanálisis por su trabajo de divulgación, Giberti continuó escribiendo. En el periódico La Razón, inauguró la exitosa Escuela para Padres, una iniciativa que replicó luego en el Hospital de Niños y la Facultad de Medicina, ganando popularidad por su «estilo coloquial».
Su vocación docente la llevó a fundar y ser titular de numerosas cátedras en la Universidad de Buenos Aires (UBA), entre otras instituciones. También dictó materias como “Deontología y ética profesional” y “Adopción” en la UCES, donde en 1998 creó el Foro de Adopción en la Asociación de Psicólogos.
En los inicios del 2000, incursionó en la función pública en el Consejo de Niños, Niñas y Adolescentes, donde se encargó de recrear el registro de adoptantes. Su mayor logro como funcionaria, durante la presidencia de Néstor Kirchner, fue la creación del Programa «Las víctimas contra las violencias», enfocado en brindar atención integral a las víctimas de abusos y malos tratos.
