El individuo le aplicó violentas trompadas, la hirió con destornillador en los brazos, la mordió e intentó asfixiarla con sus manos. Ya fue detenido por policías y será indagado en los próximos días.

Una menor de 11 años salvó a su madre de la bestial golpiza que le estaba aplicando el concubino, quien además de propinarle violentas trompadas e intentar asfixiarla con sus manos, la atacó con un destornillador y le causó lesiones que obligaron a la internación de la víctima. En medio de la agresión la niña le suplicó al sujeto que no golpee más a su madre, y en esos momentos esta escapó para pedirle auxilio a una vecina.

El grave hecho ocurrió ayer en la mañana, alrededor de las 8.30, en un inmueble situado en el barrio Virgen de Guadalupe de la Capital, y fue denunciado por la víctima en la Comisaría Nº 16 de la Mujer y la Familia, cuyas autoridades informaron de lo ocurrido a la Dra. Lucía González Farías, de turno en la Unidad Fiscal de Género y Violencia Intrafamiliar, quien requirió a la jueza de Género en turno que ordene la inmediata detención del agresor, la cual ya se hizo efectiva.

La brutal agresión

La víctima, de 29 años y madre de cuatro hijas —dos de las cuales son hijas del inculpado— relató que este es adicto al consumo de sustancias tóxicas, y que desde el martes último que la venía insultando con palabras irreproducibles, todo a causa de los celos desmedidos del individuo.

Manifestó que ayer a las 8.30 su concubino —que estaba drogado— comenzó a insultarla, para luego aplicarle violentos golpes de puño en el rostro. No conforme con ello agarró un destornillador y la hirió en los brazos, logrando ella huir hacia una habitación.

El individuo la persiguió y tras arrojarla a una cama la mordió en los brazos y en la zona vaginal, tras lo cual la golpeó en la cabeza con el destornillador e intentaba asfixiarla. Fue en esos momentos que intervino la hija de la víctima y le pidió al inculpado que no la golpee más a su madre, la cual logró escapar corriendo de la casa y pidió auxilio a una vecina.

Tuvieron que internarla

Tras la denuncia y en razón de las heridas que presentaba la víctima, fue trasladada hacia el hospital Regional para ser asistida, quedando internada. El médico de Sanidad Policial que la examinó determinó que tenía lesiones curables en 30 días.

Con dicho informe médico la fiscal González Farías imputó al agresor y requirió que sea detenido de inmediato.