Le dijeron que había ganado $ 15 mil en efectivo y $ 20 mil en orden de compra.
En tiempos de crisis, los ingresos económicos no son suficientes en gran cantidad de santiagueños para enfrentar el día a día para mantener a una familia. Esta situación es muy bien aprovechada por los delincuentes, quienes utilizan esa “desesperación” para estafar a las personas que necesitan de dinero para equilibrar sus finanzas.
Una de las últimas víctimas de los embaucadores reside en la calle Santa Lucía del barrio Triángulo de Quimilí (Mariano Moreno).
Una pensionada de 39 años recibió un llamado telefónico de un sujeto, quien manifestó ser representante de una firma comercial que no es conocida en Santiago del Estero y la característica del número telefónico es de la provincia de Córdoba. Pero a la mujer no le llamó la atención. Seguidamente, la voz masculina le dijo que la firma había realizado un sorteo y había resultado ganadora de un premio de 15 mil pesos en efectivo y de 20 mil pesos en una orden de compra. Eso fue el “gancho” para que la mujer cayera en la trampa del estafador, quien la convenció para que se trasladara hasta un cajero automático para que recibiera “de inmediato” el dinero ganado en su cuenta de ahorro de la tarjeta de débito y pudiera disponer del efectivo, mientras se tramitaba la entrega de la orden de compra, que era el otro premio.
El estafador siempre estuvo en contacto con la mujer a través del teléfono celular; incluso, cuando estuvo frente al cajero automático. El hombre la guió en los pasos que debía realizar para recibir el dinero.
Tras la operación bancaria, la pensionada se retiró del cajero automático con la promesa de su interlocutor de que “en breve” se le acreditaría el premio en su cuenta.
Posteriormente, la mujer se presentó en el cajero automático para realizar una extracción de dinero de su pensión y comprobó que mientras el sujeto la guiaba por teléfono la hizo extraer un préstamo de 90 mil pesos y fue transferido de inmediato a otra cuenta.