Con la llegada de las altas temperaturas, es esencial tomar medidas para proteger nuestra salud y cuidar nuestra piel. Aquí te dejamos algunas recomendaciones vitales para evitar golpes de calor y mantener tu piel en óptimas condiciones durante los días más calurosos del año:

Evita el sol entre las 10 y 17 horas: Durante estas horas, la radiación solar es más intensa, aumentando el riesgo de sufrir quemaduras y golpes de calor. Si es posible, planifica tus actividades al aire libre en horarios más tempranos o tardíos para reducir la exposición al sol.

Aplica protector solar en la piel: Antes de salir al aire libre, asegúrate de aplicar generosamente protector solar con un factor de protección adecuado para tu tipo de piel. No olvides zonas sensibles como el rostro, el cuello, las orejas y los brazos. Reaplica cada dos horas o con más frecuencia si estás nadando o sudando.

Mantente hidratado: El calor puede provocar una pérdida significativa de líquidos a través del sudor. Bebe entre 6 a 8 vasos de agua al día para mantener tu cuerpo bien hidratado. Evita las bebidas con alto contenido de azúcares y cafeína, ya que pueden contribuir a la deshidratación.

Protección adicional con sombrero y ropa liviana: Utiliza un sombrero de ala ancha para proteger tu rostro y cuello del sol. Además, elige ropa liviana y de colores claros que reflejen, en lugar de absorber, la luz solar. Esto ayudará a mantenerte fresco y reducirá la exposición directa a los rayos del sol.

Recuerda que la prevención es clave cuando se trata de enfrentar las altas temperaturas. Siguiendo estas recomendaciones, podrás disfrutar del verano de manera segura, protegiendo tu piel y cuidando tu salud.