Una empleada de 20 años se presentó ayer a las ocho de la mañana en un comercio de las calles Pedro León Gallo y Garibaldi del barrio Centro de la ciudad Capital para iniciar su jornada laboral. Todo aparentaba estar normal desde afuera, pero al ingresar advirtió desorden en algunas cosas. La joven realizó un relevamiento del lugar y comprobó la ausencia de 200 mil pesos que se encontraban en la caja registradora. Asimismo, estableció que habían sustraído paquetes de cigarrillos de una marca conocida.
El hecho generó que la empleada ingresara digitalmente a las cámaras de seguridad, pero develó que estaban desconectadas.
Fuentes ligadas con la investigación develaron que posiblemente el delincuente ingresó por un hueco, donde anteriormente había un extractor de aire, y por el mismo lugar se dio a la fuga, sin violentar ninguno de los accesos.
La denuncia provocó la intervención de la División Robo y Hurto de la Departamental 2 Zona Centro.