El legislador Esteban Paulón, de Provincias Unidas, presentó sendas intimaciones legales exigiendo que el proyecto sea girado a la Cámara de Diputados, argumentando que su tratamiento en el Senado viola el mandato constitucional sobre la cámara de origen para leyes impositivas.
El debate por la «Modernización Laboral» ha escalado a un conflicto de carácter constitucional. El diputado nacional Esteban Paulón (Provincia Unidas) intimó formalmente al jefe de Gabinete, Manuel Adorni, y a la vicepresidenta de la Nación y presidenta del Senado, Victoria Villarruel, para que el proyecto sea retirado de la Cámara Alta.
Paulón exige que la iniciativa sea presentada y tratada originalmente en la Cámara de Diputados, bajo apercibimiento de iniciar acciones legales.
Ultimátum por Materia Impositiva
El núcleo de la intimación se centra en el procedimiento legislativo. Paulón argumenta que el Senado no puede ser la cámara de origen del proyecto porque este incluye reformas en cargas, contribuciones, Ganancias e IVA, materias que son competencia exclusiva de la Cámara de Diputados, tal como lo establece el Artículo 52 de la Constitución Nacional.
Además, el legislador recordó que el régimen laboral constituye derecho de fondo (Art. 75, inc. 12), siendo práctica constitucional que la cámara que representa al Pueblo de la Nación, Diputados, sea la iniciadora de tales debates.
Intimaciones y Plazos
En las intimaciones compartidas en sus redes sociales:
- A Manuel Adorni: Se le exige que, en un plazo de 24 horas, envíe el proyecto de reforma laboral a la Cámara de Diputados para su correcto tratamiento.
- A Victoria Villarruel: Se le solicita que «se abstenga» de dar curso o tratamiento al proyecto en la Cámara de Senadores hasta que se dirima su cámara de origen.
Maniobra Política y “Humo”
Más allá del fundamento legal, Paulón denunció la jugada política detrás de la presentación del proyecto en el Senado. Atribuyó el ingreso a la Cámara Alta a un «capricho» de la ahora senadora Patricia Bullrich, con el objetivo de «capitalizar su posible aprobación».
El diputado fue enfático en sus críticas al Poder Ejecutivo, sosteniendo que esta «maniobra» no responde a un interés de tratamiento urgente, sino que busca «sumar escollos, dimes y diretes legislativos» que no contribuyen al debate parlamentario.
«En criollo, es humo,» afirmó Paulón, enviando un mensaje al oficialismo: «Si de verdad quieren dar los debates que dicen querer dar, deben respetar a este Congreso de la Nación y utilizar los canales interpoderes que supimos construir a pesar de las diferencias políticas.»
