La joven de 23 años dejó un escrito para su madre manifestando las causas del suicidio.
Alrededor de la una de la tarde de ayer, una mujer de 52 años se trasladó hasta un departamento donde reside su hija, ubicado en avenida Moreno casi Lamadrid del barrio Ramón Carrillo de la ciudad Capital. La puerta estaba cerrada desde adentro, por lo que la mujer recurrió a un hombre que se encontraba en las inmediaciones para que la ayudara a violentar las puertas de acceso, una construida de rejas y otra de madera.
La mujer, quien reside en otro departamento del edificio de la calle Inti Huasi del barrio Sarmiento, supuestamente presentía algo malo.
Tras violentar el acceso, la mujer ingresó al departamento y realizó un recorrido por las instalaciones. Finalmente, en el baño, encontró a su hija. La joven de 23 años en el piso, en cuclillas, con su cuerpo apoyado en las rodillas. No reaccionaba y se alertó al servicio de urgencias. Posteriormente, los paramédicos confirmaron que se encontraba sin vida.
La tragedia provocó la presencia del personal de la Comisaría Comunitaria Nº 3 y del médico de Policía que examinó el cuerpo y determinó que llevaba alrededor de seis horas de fallecida.
Como parte del procedimiento, ingresaron al lugar los efectivos de la Policía Científica para realizar las pericias. En este sentido, los investigadores secuestraron dos teléfonos celulares que se encontraban sobre un colchón que estaba en el piso, en el comedor. Asimismo, determinaron que la víctima habría utilizado la hoja de un cuadernillo para dejar un manuscrito dirigido a su madre en la que le manifestaría las causas por la que se quitaba la vida. Todo fue secuestrado como parte del procedimiento para ser analizado por los peritos. Asimismo, los investigadores recibieron los testimonios de la progenitora de la víctima y del hombre que ayudó a violentar las puertas.
La tragedia fue informada a la Dra. Jacqueline Macció, representante de la Unidad Fiscal Capital, quien ordenó que una guitarra criolla, un teclado, dos notebooks y otros artículos, muebles y electrodomésticos fueron entregados a su madre, quien quedó también a cargo del departamento de su difunta hija.
El cuerpo fue trasladado a la morgue judicial y luego entregado a su madre para la correspondiente inhumación.