Un estruendoso ruido alertó ayer a las ocho, a los vecinos de la primera cuadra de la Calle 6 del barrio Almirante Brown. Algunos de ellos salieron a la vereda para saber qué había sucedido y advirtieron una inmensa polvareda en la propiedad de la familia Luna. La parte delantera de la vivienda se había derrumbado por completo. La preocupación se adueñó de los habitantes de la zona, quienes temían que los escombros podrían haber aplastado a alguno de los moradores. Sin embargo, momentos después comprobaron que no había víctimas.
El sector que había colapsado, de nueve metros cuadrados, estaba con peligro de derrumbe, por lo que había sido clausurado oportunamente para que nadie se acercara a la estructura. A pesar de ello, los dueños de casa, quienes residían actualmente en la parte trasera, fueron sorprendidos por el estruendoso ruido y salieron hasta el patio ante el derrumbe, aunque todos estaban sanos y salvos. 
El siniestro generó la intervención del personal policial de la Comisaría Comunitaria Nº 7 y de la Prevención de la Departamental 16, quienes verificaron que no había lesionados. Asimismo, se interrumpió el servicio de energía eléctrica para evitar accidentes.