Los que impusieron sanciones, «guiados por sus infladas y ciegas ambiciones y su rusofobia, están asestando un golpe mucho más duro a sus propios intereses nacionales, a sus propias economías y a la prosperidad de sus propios ciudadanos», dijo Putin.
El presidente ruso, Vladimir Putin, acusó hoy a Occidente de «sacrificar» a gran parte del mundo y provocar una «crisis global» con tal de castigar a Rusia por la invasión a Ucrania, pero advirtió que la economía de su país es resistente a los «desafíos externos» y que Occidente está sufriendo más que Moscú por las sanciones impuestas.
Los que impusieron sanciones, «guiados por sus infladas y ciegas ambiciones y su rusofobia, están asestando un golpe mucho más duro a sus propios intereses nacionales, a sus propias economías y a la prosperidad de sus propios ciudadanos», dijo Putin en una reunión por videoconferencia sobre temas económicos con integrantes de su Gobierno, informó la agencia de noticias AFP.
Esto, prosiguió el mandatario, se pone de manifiesto «al observar el fuerte aumento de la inflación en Europa, que se acerca al 20% en algunos países».
Según Putin, «es evidente que (…) la continuación de las sanciones conducirá a las más difíciles consecuencias para la Unión Europea (UE) y sus ciudadanos», mientras Rusia «afronta con confianza los desafíos externos gracias a la política macroeconómica de los últimos años, y a las decisiones sistémicas para reforzar su soberanía económica y su seguridad tecnológica y alimentaria», aseguró.
También se congratuló por la desaceleración «gradual» de la inflación después de que se disparara hasta el 16,7% en marzo, así como del fortalecimiento de la moneda rusa.
Desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania, el 24 de febrero pasado, varias potencias occidentales aprobaron paquetes de sanciones que apuntan contra la moneda rusa, sus finanzas, su tecnología, todos los sectores económicos, además de sus principales políticos y oligarcas.
Putin aseguró que la victoria soviética sobre la Alemania nazi -hace 77 años- «se logró no solo en las batallas en los frentes, sino también gracias al poder económico del país, que en ese momento se enfrentó al potencial industrial no solo de Alemania, sino de casi toda Europa».
«Nuestras empresas productivas están ocupando paulatinamente los nichos que quedaron vacantes tras la salida de socios sin escrúpulos en el mercado interno, incluyendo bienes de consumo, equipamiento industrial y de servicios, maquinaria de construcción y agrícola», dijo.
Rusia, que es el segundo productor de grano después de Ucrania, espera una cosecha récord este año de 130 millones de toneladas, incluyendo 87 millones de toneladas de trigo, lo que permitirá «no solo satisfacer las necesidades internas con un margen, sino también aumentar los suministros al mercado global para nuestros socios, lo cual es muy importante para los mercados globales de alimentos», subrayó el mandatario
Entre enero y abril -agregó- el superávit presupuestario consolidado ascendió a 2,7 billones de rublos (41.000 millones de dólares), aunque los gastos también crecieron notablemente debido a decisiones para sostener la economía.
A finales de febrero, tras el inicio de la ofensiva militar rusa en Ucrania, el rublo cotizaba por encima de las 103 unidades por dólar y hoy se situaba en 65 por billete verde por primera vez desde principios de 2020.
Durante su comparecencia, Putin no aludió a los últimos movimientos de los países nórdicos (Finlandia y Suecia) que buscan adherirse a la OTAN, a pesar de que los principales líderes políticos finlandeses dieron hoy su apoyo a la integración en la Alianza Atlántica.
Sí lo hizo la cancillería rusa que advirtió que habrá «represalias», sin brindar más detalles. (Télam)