Entre los considerandos, Milei sostuvo que es más importante el derecho a la intimidad que poner fin a un delito que lleva más de 40 años. Cientos de personas siguen desconociendo su verdadera identidad.
El gobierno de Javier Milei dio este miércoles un paso más en su deriva negacionista y eliminó la Unidad Especial de Investigación que tenía por objetivo encontrar a los nietos secuestrados por la dictadura cívico militar que tanto venera la vicepresidenta Victoria Villarruel. La polémica medida se da apenas unas semanas después de que un contingente de diputados de La Libertad Avanza visitara a genocidas condenados por delitos de lesa humanidad.
Así quedo plasmado en el Decreto 727/2024 publicado hoy en el Boletín Oficial con las firmas del presidente de Milei y el ministro de Justicia de la Nación, Mariano Cúneo Libarona.
Abuelas de Plaza de Mayo ya había advertido que el gobierno planeaba retirar al Estado de la búsqueda de víctimas de la dictadura y abandonar el camino de Memoria, Verdad y Justicia.
El Decreto 727/2024 derogó Decreto 715/2004 del ex presidente Néstor Kirchner que funcionaba en la órbita de la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (CONADI), una herramienta que permitió avanzar en la recuperación de la identidad de nietos apropiados.
Entre los considerandos de la medida, el Gobierno advirtió que la unidad tenía «acceso directo e irrestricto a información y documentación en poder de organismos públicos y potestades que son de estricto resorte legal del Poder Judicial de la Nación y de los fiscales que integran el Ministerio Público Fiscal». En esa línea, señaló que se trata de herramientas que «violentan nuestro régimen constitucional».
Y señaló que «corresponde al Ministerio Público Fiscal la investigación y promoción de acciones judiciales orientadas al juzgamiento de los delitos ante el Poder Judicial» y que por tal motivo se creó «en el ámbito de la Procuraduría de Crímenes contra la Humanidad la ‘Unidad especializada para casos de apropiación de niños durante el terrorismo de Estado'».
Para el gobierno de Milei es más importante «el derecho a la intimidad» que encontrar a los bebés que fueron secuestrados, un delito que sigue ocurriendo al día de hoy con los centenares de hombres y mujeres que desconocen su verdadera identidad. El decreto advierte que la Unidad Especial de Investigación viola preceptos constitucionales «como el artículo 43 que protege el derecho a la intimidad, uno de los más preciados valores del respeto a la dignidad del ser humano, por lo que este solo puede ser objeto de injerencia en la medida en que exista una orden judicial debidamente fundada destinada a obtener información específica, legítima, idónea, proporcional y razonable a los fines buscados, sin que pueda ser evitada en miras a satisfacer una necesidad genérica y abstracta de prevenir o descubrir delitos».
En ese sentido, afirman que las facultades de investigación que le fueron otorgadas a la Unidad Especial de Investigación «contravienen lo establecido en los artículos 19, 43, 108, 109, 116 y 120 de la CONSTITUCIÓN NACIONAL y de la Ley Orgánica del Ministerio Público Fiscal N° 27.148 y sus modificatorias».
Repudio de Abuelas
Abuelas de Plaza de Mayo advirtió sobre las consecuencias de la eliminación de la unidad para búsqueda de nietos apropiados.
La normativa, que entró en vigencia a partir de hoy, llega apenas semanas después de que desde la organización Abuelas de Plaza de Mayo advirtiera en un comunicado que el Gobierno tenía listo un proyecto de decreto para eliminar el organismo de la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (Co.Na.DI), dependiente de la Secretaria de Derechos Humanos a cargo de Alberto Baños.
A fines de junio, Abuelas alertó que en caso de llevarse adelante esta decisión, se «ralentizará la búsqueda de nuestros nietos y nietas y resultará un perjuicio para la ciudadanía, un obstáculo para la justicia y un gasto para el Estado».
La UEI, que fue creada en 2004 asiste a jueces y fiscales en casos de posible sustitución de identidad, para evitar que se abran en la justicia causas improcedentes. En la actualidad, Abuelas cuenta con alrededor de 7.000 denuncias de posibles hijos e hijas de personas desaparecidas que son analizados por esta unidad.