Organizado por la parroquia Sumampa, la caravana ocupó más de 10 cuadras.

Ayer, en un gesto de devoción en el Viernes Santo, recordando el momento donde Jesús recorrió las calles de Jerusalén con la Cruz a cuestas para ser crucificado, una multitud de santiagueños, más de un kilómetro de caravana de motos y bicicletas, recorrieron diferentes iglesias a lo largo de la ciudad Capital, conmemorando y recordando el acto de Cristo. Desde las primeras horas de la mañana, los peregrinos se congregaron en la parroquia Nuestra Señora de Sumampa para dar inicio a esta tradición que rinde homenaje a Jesucristo, contando en esta ocasión con la imagen de Santa Mama Antula. Con una emotiva ceremonia de inicio, los devotos expresaron su gratitud por los 40 años de este evento que ha unido al pueblo santiagueño en torno al camino al Calvario de Jesucristo. La jornada estuvo marcada por momentos llenos de fe, rezos y emociones compartidas. El Vía Crucis, que comenzó puntualmente a las ocho de la mañana, recorrió diversos barrios de la Capital, pasando por la capilla Virgen del Valle, Don Bosco, Virgen de Fátima, Santa Rosa de Lima, parroquia La Piedad, San José Obrero, Mailín, San Roque, Santa Rita, Luján, Sagrado Corazón de Jesús, San Francisco y la Catedral Basílica.

Cada parada evocaba la Pasión y entrega de Jesús en su camino hacia la crucifixión. La presencia de asistentes de otras provincias como de San Juan, Catamarca y Tucumán, entre otras, demostró el impacto de esta celebración más allá de las fronteras de Santiago.